25/02/2016, 21:13
Mientras acariciaba su pelo hasta intentar volver a ponerlo en ordén, sin querer acabo dejado que un mechón de su cabello ocultase uno de sus azulados ojos, en concreto el izquierdo. Al escuchar a la kunoichi, se quedo algo sorprendido y a la vez extrañado por aquella pregunta
¿Que cuantos dedos veo? ¿Me estará tomando el pelo?...
Len se quedo extrañado ante aquella pregunta, ladeó la cabeza cruzando sus brazos mientras levantaba su ceja izquierda y bajaba la derecha con gestó de extrañez en su boca.
¿Te refieres por el golpe? Si es asi no tienes de que preocuparte, me pasa muy a menudo -Contestó con una ámplia sonrisa en la que se le podía dislumbrar su colmillo izquierdo junto con sus ojos cerrados, mientras acariciaba la cogorota de su palida media melena con la mano derecha- En serio, es ya casi una rutina asi que no tienes porque preocuparte
Sin embargo, un pequeño atisbo de tristeza se pudo dislumbrar durante un segundo en sus ojos, miró al suelo por un instante, con la mirada perdida y sin luz en sus ojos, pero rapidamente se recompuso debido a que no queria molestar, y mucho menos preocupar a la joven kunoichi que tenia delante.
¿E-Estabas entrenando? -Dijó en el momento señalando a un magullado saco de boxeo con una ligera gota de sudor frío recorriendo su rostro, con la esperanza de que no se hubiera percatado de aquella pequeña bajada de autoestima- ¡P-Perdonamé, no queria interrumpirte! ¡De veras! ¡Siento haber interrumpido tu entrenamiento! -Exclamó juntando las manos arrepentido delante suya, dando una ligera palmada y colocandose con la tipica posición de disculpa asiatica, se sentia bastante arrepentido, ya que es una persona a la que no le gusta molestar a los demas por lo que de sus ojos brotarón sin querer algunas pequeñas lagrimas; en ese momento, cambio su expresión a una mas de... Infantil... Acerco sus brazos a su torso, teniendo las manos cerradas cerca de su rostro mientras gimoteaba con lagrimas en los ojos.
No me pegues te lo suplico... -Susurró levemente entre lloriqueos.
¿Que cuantos dedos veo? ¿Me estará tomando el pelo?...
Len se quedo extrañado ante aquella pregunta, ladeó la cabeza cruzando sus brazos mientras levantaba su ceja izquierda y bajaba la derecha con gestó de extrañez en su boca.
¿Te refieres por el golpe? Si es asi no tienes de que preocuparte, me pasa muy a menudo -Contestó con una ámplia sonrisa en la que se le podía dislumbrar su colmillo izquierdo junto con sus ojos cerrados, mientras acariciaba la cogorota de su palida media melena con la mano derecha- En serio, es ya casi una rutina asi que no tienes porque preocuparte
Sin embargo, un pequeño atisbo de tristeza se pudo dislumbrar durante un segundo en sus ojos, miró al suelo por un instante, con la mirada perdida y sin luz en sus ojos, pero rapidamente se recompuso debido a que no queria molestar, y mucho menos preocupar a la joven kunoichi que tenia delante.
¿E-Estabas entrenando? -Dijó en el momento señalando a un magullado saco de boxeo con una ligera gota de sudor frío recorriendo su rostro, con la esperanza de que no se hubiera percatado de aquella pequeña bajada de autoestima- ¡P-Perdonamé, no queria interrumpirte! ¡De veras! ¡Siento haber interrumpido tu entrenamiento! -Exclamó juntando las manos arrepentido delante suya, dando una ligera palmada y colocandose con la tipica posición de disculpa asiatica, se sentia bastante arrepentido, ya que es una persona a la que no le gusta molestar a los demas por lo que de sus ojos brotarón sin querer algunas pequeñas lagrimas; en ese momento, cambio su expresión a una mas de... Infantil... Acerco sus brazos a su torso, teniendo las manos cerradas cerca de su rostro mientras gimoteaba con lagrimas en los ojos.
No me pegues te lo suplico... -Susurró levemente entre lloriqueos.