El rasta y el Uchiha

[Riko]

Uchiha Nabi

Aquel nombre no lo olvidaría, y, gracias a él, a partir de entonces tendría cuidado con todos los que se encontrara que llevaran el apellido Uchiha, o incluso que cambiaran sus ojos de color, había aprendido que era mejor evitarlos, a no ser de estar muy seguro de poder hacer algo contra ellos, así que se andaría con cuidado.

De repente de la nada un hombre apareció, visiblemente alterado, pues había visto un posible fuego que se había producido a raíz de la técnica ígnea de Nabi, que, tan débil había sido que apenas la lluvia había había comenzado se había sofocado por sí mismo.

— No, nada más lejos de la realidad señor, simplemente estábamos entrenando, no ha habido ningún peligro de fuego en ningún momento, no se preocupe, siento si le hemos asustado. — Dijo mientras hacía una leve reverencia.

Riko se disculpó de la forma más formal que pudo, no sabía quien era aquel hombre, y prefería disculparse aunque no tuviera motivos para ello a tener algún tipo de problema burocrático.

El hombre, que había ido apagando su ira según el joven iba hablando, comenzó a enrojecer, pero esta vez de vergüenza al confundir a dos shinobis de su villa con unos vándalos.

— Est... Esto... Lo siento... N-No había imaginado que era eso... —

Y tal cual hizo acto de presencia, desapareció.

— Qué gente tan rara hay por ahí... — Dijo Riko para que el Uchiha le escuchase.