16/03/2016, 15:50
Tatsuya se sorprendió bastante por el hecho de que ambos ninja hubiesen venido para aprender, por un momento se sintió mal consigo mismo, el no suele pensar de esa manera ya que siempre ha creído que los eventos de combate son meras mascaradas. Pero, al ver como Mogura y Riko eran observadores dedicados le hizo cuestionarse a sí mismo; siempre ha creído que no existe una sana competitividad, es un prejuicio que el tiene en relación a como se realizan las contiendas en los torneos entre ninjas, pero, el hecho de que pueda ser de útilidad para aprender de los demás shinobis para mejorar a raíz de la observación, es una posibilidad que el no había tomado en cuenta. Tatsuya dudaba si seguir con su planteamiento o considerar ser como los otros shinobis y disfrutar en mayor medida de este y futuros torneos.
"Talvez he sido demasiado caprichoso y debo corregir mi actitud.- Pensó.
En esos momentos llegaba el camarero, sirviendo el pedido de cada uno, Riko agradeció y Tatsuya reverenció cadenciosamente para agradecer también pero sin decir ninguna palabra; por otro lado le había llamado la atención el comentario de Riko respecto al porque había llegado tarde, le pareció una interesante y muy extraña casualidad; Tatsuya aprovecharía para responder a las inquietudes de Mogura y de Riko a la vez.
-Es curioso, no es una misión pero me siento como si de verdad fuera una- Dijo mientras tomaba la taza de té con una mano y la apoyaba sobre la palma de la otra. -Por extraño que parezca mi padre es quién me obligo a venir y paradójicamente es por él que llegamos tarde.- Y luego de decir aquello tomó un sorbo de su té.
Sí, su padre el que estaba presionándolo tanto fue el motivo del retraso, además sintió una leve amargura al acordarse de que habían dejado a su madre enferma y a Katsuo cuidándola; si bien era cierto que su madre había mejorado un poco antes de que vinieran al torneo aún seguía en cama, al pensar en ello se quedó observando su reflejo en la verdosa agua del té mientras seguía con su relato.
-Me molesta venir, porque mi padre insistió aún cuando mi madre se encuentra enferma en casa, al ser de una familia reconocida de mi país cree que es más importante cumplir con los compromisos que tiene con sus colegas y superiores que la salud de su propia esposa- Sentenció con tono algo triste, aunque pronto sacudió un poco la cabeza para no seguir deprimiéndose y mostró estar mas atento hacía Riko y Mogura. -Lamento haberles soltado un discurso sobre mis problemas, no quiero arruinarles la comida, pero siento como sí estuviera abandonando a mi madre-
"Talvez he sido demasiado caprichoso y debo corregir mi actitud.- Pensó.
En esos momentos llegaba el camarero, sirviendo el pedido de cada uno, Riko agradeció y Tatsuya reverenció cadenciosamente para agradecer también pero sin decir ninguna palabra; por otro lado le había llamado la atención el comentario de Riko respecto al porque había llegado tarde, le pareció una interesante y muy extraña casualidad; Tatsuya aprovecharía para responder a las inquietudes de Mogura y de Riko a la vez.
-Es curioso, no es una misión pero me siento como si de verdad fuera una- Dijo mientras tomaba la taza de té con una mano y la apoyaba sobre la palma de la otra. -Por extraño que parezca mi padre es quién me obligo a venir y paradójicamente es por él que llegamos tarde.- Y luego de decir aquello tomó un sorbo de su té.
Sí, su padre el que estaba presionándolo tanto fue el motivo del retraso, además sintió una leve amargura al acordarse de que habían dejado a su madre enferma y a Katsuo cuidándola; si bien era cierto que su madre había mejorado un poco antes de que vinieran al torneo aún seguía en cama, al pensar en ello se quedó observando su reflejo en la verdosa agua del té mientras seguía con su relato.
-Me molesta venir, porque mi padre insistió aún cuando mi madre se encuentra enferma en casa, al ser de una familia reconocida de mi país cree que es más importante cumplir con los compromisos que tiene con sus colegas y superiores que la salud de su propia esposa- Sentenció con tono algo triste, aunque pronto sacudió un poco la cabeza para no seguir deprimiéndose y mostró estar mas atento hacía Riko y Mogura. -Lamento haberles soltado un discurso sobre mis problemas, no quiero arruinarles la comida, pero siento como sí estuviera abandonando a mi madre-