21/09/2020, 09:14
— Hombre, Mochi, cuanto tiempo. Ya sabes, 100 ryos, el camino está despejado.
— S-sí, c-claro... — si el hombre no estaba suficientemente acojonado por el tipo usual, la kunoichi de Amegakure musculada lo remataría.
El miedo de aquel hombre era lo suficientemente notable y palpable para que la kunoichi se diera cuenta, pero tal vez era por experiencias pasadas. Tal vez el camino era mucho más peligroso de lo esperado y pese a no llegar a sufrir daños, ver a los guardaespaldas y los mercenarios combatir día tras día podría haberle afectado. La tasa no era muy alta, y el comerciante no parecía sorprendido por "un cambio de precio" por lo que Ren aceptó de buena fe como era natural en ella.
— No se preocupe señor, nosotros le cubriremos de asaltantes o lo que haga falta — respondería con una sincera sonrisa, dejando que avanzara para continuar con él.
Al fin y al cabo, por asaltarles, podía atacarles hasta un oso o algún otro animal de la zona. Ya no solo por los bandidos, aquella gente si que podía ser útil.
— S-sí, c-claro... — si el hombre no estaba suficientemente acojonado por el tipo usual, la kunoichi de Amegakure musculada lo remataría.
El miedo de aquel hombre era lo suficientemente notable y palpable para que la kunoichi se diera cuenta, pero tal vez era por experiencias pasadas. Tal vez el camino era mucho más peligroso de lo esperado y pese a no llegar a sufrir daños, ver a los guardaespaldas y los mercenarios combatir día tras día podría haberle afectado. La tasa no era muy alta, y el comerciante no parecía sorprendido por "un cambio de precio" por lo que Ren aceptó de buena fe como era natural en ella.
— No se preocupe señor, nosotros le cubriremos de asaltantes o lo que haga falta — respondería con una sincera sonrisa, dejando que avanzara para continuar con él.
Al fin y al cabo, por asaltarles, podía atacarles hasta un oso o algún otro animal de la zona. Ya no solo por los bandidos, aquella gente si que podía ser útil.