17/07/2016, 21:27
El entusiasmo de Katomi, le pillo por sorpresa; abalanzandose como una chica que mantiene una relación a distancia mediante cartas o cualquier otro sistema con su novio, y lo vé por primera vez en mucho tiempo, esta se abalanzó sobre Mogura como un tigre intenta devorar a un conejo; haciendo que el joven canoso se sintiera como un candelabro o la tercera rueda de una bicicleta, pero tampoco le importó mucho. Sonrió y despues soltó una tímida carcajada al ver la escena, siendole imposible recordar los lios y problemas que les dio el poco tiempo que estuvo con ellos.
— Sigh... Supongo que no tendran muchas esperanzas tampoco en mi, es decir... Solo se meterme en lios. — Se acarició la nuca, desviando la mirada y perdiendo toda la atención, abstrayendose del mundo.
Pero un rapido besó lo trajo de vuelta, asombrado frente al acto de confianza, o mas bien de entsusiasmo y locura; Len no pudo evitar sonrojarse brevemente mientras la miraba con los ojos abiertos como platos.
— ¿Q-Que? — Su mente se nubló haciendo que perdiera la seria compostura que estaba intentando mantener, por lo que se llevo una mano a la cara tratando de ocultar su rubor, pero con los dedos entreabiertos, por lo que eso y nada, era lo mismo, incluso giró parte del cuerpo. Pero para que, era demasiado evidente.
Como siempre, su compañero Mogura se le acerco con todo el respeto saludandole como si todo lo de hace un momento, fuera de lo mas normal.
— Buenos días, Len-san. Tanto tiempo sin vernos. — Dijo con su habitual tono, calmado y sosegado en todo momento. Como el de una persona anciana que pese a que su vida se escapa entre sus manos, decide que tiene todo el tiempo del mundo.
— B-Buenos dias a ti tambien, Moguri. — Pese al tiempo, aun recordaba el apodo que le habia puesto, respondió todavia algo nervioso, mirando en dirección contraria a donde parecia que seria, el lugar donde debian hacer su misión.
— Maldita sea ¿A que puñetas ha venido eso? ¿Es asi con todos? — Se acarició levemente los labios, como si apartara de ellos un cigarrillo y tras ello, solto un breve suspiro, que interiormente, fue muy aliviador. — Nah, que va. Es decir. Compara los entusiasmos de ambos actos, seguro que todavia esta algo mosqueada por lo de la ultima vez... En fin, gran idea la mia tambien. — Entrecerró los ojos, y se tapó brevemente la boca con la parte superior de la capa. Parece que se le planteaba un gran dia.
— Sigh... Supongo que no tendran muchas esperanzas tampoco en mi, es decir... Solo se meterme en lios. — Se acarició la nuca, desviando la mirada y perdiendo toda la atención, abstrayendose del mundo.
Pero un rapido besó lo trajo de vuelta, asombrado frente al acto de confianza, o mas bien de entsusiasmo y locura; Len no pudo evitar sonrojarse brevemente mientras la miraba con los ojos abiertos como platos.
— ¿Q-Que? — Su mente se nubló haciendo que perdiera la seria compostura que estaba intentando mantener, por lo que se llevo una mano a la cara tratando de ocultar su rubor, pero con los dedos entreabiertos, por lo que eso y nada, era lo mismo, incluso giró parte del cuerpo. Pero para que, era demasiado evidente.
Como siempre, su compañero Mogura se le acerco con todo el respeto saludandole como si todo lo de hace un momento, fuera de lo mas normal.
— Buenos días, Len-san. Tanto tiempo sin vernos. — Dijo con su habitual tono, calmado y sosegado en todo momento. Como el de una persona anciana que pese a que su vida se escapa entre sus manos, decide que tiene todo el tiempo del mundo.
— B-Buenos dias a ti tambien, Moguri. — Pese al tiempo, aun recordaba el apodo que le habia puesto, respondió todavia algo nervioso, mirando en dirección contraria a donde parecia que seria, el lugar donde debian hacer su misión.
— Maldita sea ¿A que puñetas ha venido eso? ¿Es asi con todos? — Se acarició levemente los labios, como si apartara de ellos un cigarrillo y tras ello, solto un breve suspiro, que interiormente, fue muy aliviador. — Nah, que va. Es decir. Compara los entusiasmos de ambos actos, seguro que todavia esta algo mosqueada por lo de la ultima vez... En fin, gran idea la mia tambien. — Entrecerró los ojos, y se tapó brevemente la boca con la parte superior de la capa. Parece que se le planteaba un gran dia.