10/01/2017, 21:29
(Última modificación: 11/01/2017, 15:00 por Manase Mogura.)
Aquella célebre ubicación donde tres eminencias legendarias se habrían encontrado durante su tiempo como mortales en la tierra con el fin de terminar con el imperio del terror de las bestias con colas. La batalla tendría como uno de los tantos resultados, la formación de aquel paisaje, un lago con una desembocadura hacía un acantilado el cual sería posteriormente decorado con estatuas de los responsables de aquello.
¿Qué razón podría llegar a tener un joven genin para dejar su aldea y marchar hasta un lugar tan remoto, casi despoblado? La respuesta era un poco particular pero lo cierto era que el joven médico no estaba viajando solo aquel día. Mogura acompañaba a su único pariente en una aventura por buscar ciertas especie de la fauna local para la confección de ciertos productos para el negocio que poseían.
Un sapo purpura con motas azules. ¿Qué tan complicado podría ser encontrar uno en un lugar como aquel? Ciertamente era complicado, al menos para el muchacho de cabello azabache. Terminaría alejándose un poco del pequeño campamento que habrían montado él y su abuelo para peinar la zona y buscar al reptil.
Con una jaula de madera en su espalda y su equipo habitual se dio entonces a la tarea de atrapar el bicho que buscaba, no deseaba volver con las manos vacías. Durante una hora se dedico a esquivar ramas y serpientes estando cerca de perder la partida una o dos veces, nada de muerte pero seguro que la pasaría mal.
¡Ahí estas!
No pudo evitar lanzar las palabras con suma energía y formar un grito de emoción al hacer contacto visual con el sapo que buscaba pero para su infortunio el animal no estaba con mucho humor de acercarse al muchacho de Amegakure.
¡Hey, no! ¡Ven aquí!
Procurando no perder la jaula que cargaba en su espalda a modo de mochila, correría tanto como pudiese detrás de aquella criatura. De entre los arboles un brillo comenzaba a manifestarse, este era el reflejo de la luz del sol en las aguas del lago, el sapo iba dando saltos bordeando el lado tomando como rumbo una de las estatuas de los lideres ninja que guardaban la cascada.
La pareja de Uzushiogakure podría ver desde la distancia como un sapo purpura oscuro con motas azules también de un tono similar trataba de escapar de un shinobi de Amegakure, esto claro, si es que se giraban a ver en la dirección contraría del lago.
¿Qué razón podría llegar a tener un joven genin para dejar su aldea y marchar hasta un lugar tan remoto, casi despoblado? La respuesta era un poco particular pero lo cierto era que el joven médico no estaba viajando solo aquel día. Mogura acompañaba a su único pariente en una aventura por buscar ciertas especie de la fauna local para la confección de ciertos productos para el negocio que poseían.
Un sapo purpura con motas azules. ¿Qué tan complicado podría ser encontrar uno en un lugar como aquel? Ciertamente era complicado, al menos para el muchacho de cabello azabache. Terminaría alejándose un poco del pequeño campamento que habrían montado él y su abuelo para peinar la zona y buscar al reptil.
Con una jaula de madera en su espalda y su equipo habitual se dio entonces a la tarea de atrapar el bicho que buscaba, no deseaba volver con las manos vacías. Durante una hora se dedico a esquivar ramas y serpientes estando cerca de perder la partida una o dos veces, nada de muerte pero seguro que la pasaría mal.
¡Ahí estas!
No pudo evitar lanzar las palabras con suma energía y formar un grito de emoción al hacer contacto visual con el sapo que buscaba pero para su infortunio el animal no estaba con mucho humor de acercarse al muchacho de Amegakure.
¡Hey, no! ¡Ven aquí!
Procurando no perder la jaula que cargaba en su espalda a modo de mochila, correría tanto como pudiese detrás de aquella criatura. De entre los arboles un brillo comenzaba a manifestarse, este era el reflejo de la luz del sol en las aguas del lago, el sapo iba dando saltos bordeando el lado tomando como rumbo una de las estatuas de los lideres ninja que guardaban la cascada.
La pareja de Uzushiogakure podría ver desde la distancia como un sapo purpura oscuro con motas azules también de un tono similar trataba de escapar de un shinobi de Amegakure, esto claro, si es que se giraban a ver en la dirección contraría del lago.
Hablo - Pienso