27/02/2017, 16:34
—Ignora lo de la votación, es una estupidez sin sentido.
Eri asintió no muy convencida, pues la verdad que quería saber a qué se refería con lo de esa tal votación... Sin embargo luego se lo planteó dos veces antes de preguntar una segunda vez pues podría ser algún tema íntimo de Haskoz y Noemi y ella ahí ya no pintaba nada.
Así que se dejó llevar.
— Que nos hayamos graduado no significa que nos tengamos que distanciar sin más, ¿verdad? Digo, ¿cómo te ha ido desde la graduación? ¿Has hecho algo interesante como kunoichi?
— Tienes razón, Noemi-san. — Afirmó formando una sonrisa en sus labios. — Es bueno cuidar de los lazos que hemos formado, sino... Suelen romperse. — Afirmó mientras reposaba ambas manos detrás de su espalda mientras entrelazaba sus dedos, inclinándose un poco para asomarse al mar.
Pausó un momento mientras disfrutaba de la brisa marina, incluso se vio tentada de cerrar los ojos y dejarse llevar, pero en el último momento se contuvo pues podría parecer algo extraño ante los demás.
— He viajado. — Dijo al cabo de unos segundos. — Fui al Valle del Fin, al Puente Kannabi también... Incluso he estado en el Bosque de la Hoja. — Hizo una breve pausa al recordar lo que allí vio, algo que no debía revelar. — He... Estado intentando hacer misiones, pero no sé si las llevé bien o no, no me han dicho nada.
Se encogió de hombros mientras desviaba la mirada hacia el horizonte, luego suspiró, cerró los ojos, y se dio la vuelta para encarar a Noemi pensando que seguramente la vida de la rubia era muchísimo más interesante que la suya. Sí, había viajado y había conocido a mucha gente, pero tampoco había tenido experiencias nuevas y gratificantes como kunoichi.
A excepción de su viaje a la Hoja.
O lo que quedaba de ella.
— ¿Y tú?
Eri asintió no muy convencida, pues la verdad que quería saber a qué se refería con lo de esa tal votación... Sin embargo luego se lo planteó dos veces antes de preguntar una segunda vez pues podría ser algún tema íntimo de Haskoz y Noemi y ella ahí ya no pintaba nada.
Así que se dejó llevar.
— Que nos hayamos graduado no significa que nos tengamos que distanciar sin más, ¿verdad? Digo, ¿cómo te ha ido desde la graduación? ¿Has hecho algo interesante como kunoichi?
— Tienes razón, Noemi-san. — Afirmó formando una sonrisa en sus labios. — Es bueno cuidar de los lazos que hemos formado, sino... Suelen romperse. — Afirmó mientras reposaba ambas manos detrás de su espalda mientras entrelazaba sus dedos, inclinándose un poco para asomarse al mar.
Pausó un momento mientras disfrutaba de la brisa marina, incluso se vio tentada de cerrar los ojos y dejarse llevar, pero en el último momento se contuvo pues podría parecer algo extraño ante los demás.
— He viajado. — Dijo al cabo de unos segundos. — Fui al Valle del Fin, al Puente Kannabi también... Incluso he estado en el Bosque de la Hoja. — Hizo una breve pausa al recordar lo que allí vio, algo que no debía revelar. — He... Estado intentando hacer misiones, pero no sé si las llevé bien o no, no me han dicho nada.
Se encogió de hombros mientras desviaba la mirada hacia el horizonte, luego suspiró, cerró los ojos, y se dio la vuelta para encarar a Noemi pensando que seguramente la vida de la rubia era muchísimo más interesante que la suya. Sí, había viajado y había conocido a mucha gente, pero tampoco había tenido experiencias nuevas y gratificantes como kunoichi.
A excepción de su viaje a la Hoja.
O lo que quedaba de ella.
— ¿Y tú?