5/08/2017, 02:13
Los kages, especialmente Gōna, comenzaron a intercambiar información y a explicar el motivo de tal reunión, no sin antes mostrar sus diferencias: una agresiva Arashikage (”¡Yui! ¡Su nombre es Yui!”), una seria Uzukage y un calmado Morikage.
Comenzaban a hablar sobre unos hombres misteriosos, los cuales mencionaban una especie de hilos de alguna índole, posiblemente en código, cuando sucedió algo extraño. De alguna parte de su mente, un recuerdo surgió ante Taeko y se esfumó de repente.
Alguna vez en su vida lo había escuchado, no sabía de dónde. Y por alguna razón le daba la sensación de haberlo percibido tal como había percibido su plática con Reika hacía ya tanto; como una voz etérea, ajena al sonido de una voz convencional. La peliplateada torció la cabeza, extrañada. Sin embargo, algo la sorprendió aun más: un misterioso tic tac que resonó en la parte trasera de su cabeza.
Se preguntó entonces si alguien más había escuchado algo raro, pero la situación continuó como si nada, con Gōna explicando lo que había presenciado ella y los suyos.
”Debí de haberlo imaginado… ¿quién podría haberme dicho algo así de críptico?”
La Uzukage prosiguió. Unos hombres encapuchados habían extraído una cantidad monumental de “chakra natural” de un punto en el mundo, y al parecer planeaba hacer lo mismo con otros 3 sitios: el Árbol Sagrado del País del Bosque, una isla del Remolino llamada la Mediana Roja, y una ciudad de la Lluvia conocida como la Ciudad Fantasma.
”Chakra natural… Suena importante. Puro e inmaculado, como agua de un río virgen… Mmm… debo de escribir eso cuando regrese a casa.”
La misión entonces era clara: ir a los tres puntos y detener a los encapuchados antes de que llevasen a cabo cual sea fuere su plan malvado. Taeko asintió mientras la Uzukage repartía unos pergaminos a sendos líderes de grupo. El corazón de la jovencita latía de emoción y temor.
Aceptando su destino, todos los genin se dispusieron a seguir a sus líderes. El tipo del sombrero, cabello azul y cejas pobladas, llamado Yubiwa, era quien guiaría a Yota y Taeko. El rubio le tendió amablemente un caramelo a la peliplateada, quien lo aceptó con gusto y una sonrisa. Lo desenvolvió y se lo metió a la boca, intentando quitar algo de los nervios en su interior con algo dulce. Recordó que el chico le había preguntado el porqué de su nota, así que la jovencita se apresuró a escribir una más, sin dejar de seguir a los dos.
≫Disculpa, Yota-san. No quise ser descortés.
Es solo que no soy capaz de hablar.
Se la mostró con cara alegre, pues muchos se apenaban por sacar a conversación el tema de su mudez. El chico le preguntó al peliazul algo muy pertinente acerca del chakra natural, algo que también le hubiese gustado saber a la chica.
”¿Debería de escribirle algo a Yubiwa-san? No, no creo que haya tiempo. ¡Tenemos que partir cuanto antes!”
Y sin dejar de prestar atención, siguió a los dos ninjas en su camino hacia el Árbol Sagrado.
”Menos mal que traje todo mi equipo conmigo. ¡Excepto uno! Oh, si pudiera usar la arena ya, estaría mejor preparada para esta misión. Creo que es mejor que mi madre crea que estoy en una misión clase D. ¡Así no se preocupará tanto!”
Comenzaban a hablar sobre unos hombres misteriosos, los cuales mencionaban una especie de hilos de alguna índole, posiblemente en código, cuando sucedió algo extraño. De alguna parte de su mente, un recuerdo surgió ante Taeko y se esfumó de repente.
"...la tela del mundo lleva construyéndose mucho, mucho tiempo."
"Cuidáos del hombre con la risa escalofriante".
"Cuidáos del hombre con la risa escalofriante".
Alguna vez en su vida lo había escuchado, no sabía de dónde. Y por alguna razón le daba la sensación de haberlo percibido tal como había percibido su plática con Reika hacía ya tanto; como una voz etérea, ajena al sonido de una voz convencional. La peliplateada torció la cabeza, extrañada. Sin embargo, algo la sorprendió aun más: un misterioso tic tac que resonó en la parte trasera de su cabeza.
Se preguntó entonces si alguien más había escuchado algo raro, pero la situación continuó como si nada, con Gōna explicando lo que había presenciado ella y los suyos.
”Debí de haberlo imaginado… ¿quién podría haberme dicho algo así de críptico?”
La Uzukage prosiguió. Unos hombres encapuchados habían extraído una cantidad monumental de “chakra natural” de un punto en el mundo, y al parecer planeaba hacer lo mismo con otros 3 sitios: el Árbol Sagrado del País del Bosque, una isla del Remolino llamada la Mediana Roja, y una ciudad de la Lluvia conocida como la Ciudad Fantasma.
”Chakra natural… Suena importante. Puro e inmaculado, como agua de un río virgen… Mmm… debo de escribir eso cuando regrese a casa.”
La misión entonces era clara: ir a los tres puntos y detener a los encapuchados antes de que llevasen a cabo cual sea fuere su plan malvado. Taeko asintió mientras la Uzukage repartía unos pergaminos a sendos líderes de grupo. El corazón de la jovencita latía de emoción y temor.
Aceptando su destino, todos los genin se dispusieron a seguir a sus líderes. El tipo del sombrero, cabello azul y cejas pobladas, llamado Yubiwa, era quien guiaría a Yota y Taeko. El rubio le tendió amablemente un caramelo a la peliplateada, quien lo aceptó con gusto y una sonrisa. Lo desenvolvió y se lo metió a la boca, intentando quitar algo de los nervios en su interior con algo dulce. Recordó que el chico le había preguntado el porqué de su nota, así que la jovencita se apresuró a escribir una más, sin dejar de seguir a los dos.
≫Disculpa, Yota-san. No quise ser descortés.
Es solo que no soy capaz de hablar.
Se la mostró con cara alegre, pues muchos se apenaban por sacar a conversación el tema de su mudez. El chico le preguntó al peliazul algo muy pertinente acerca del chakra natural, algo que también le hubiese gustado saber a la chica.
”¿Debería de escribirle algo a Yubiwa-san? No, no creo que haya tiempo. ¡Tenemos que partir cuanto antes!”
Y sin dejar de prestar atención, siguió a los dos ninjas en su camino hacia el Árbol Sagrado.
”Menos mal que traje todo mi equipo conmigo. ¡Excepto uno! Oh, si pudiera usar la arena ya, estaría mejor preparada para esta misión. Creo que es mejor que mi madre crea que estoy en una misión clase D. ¡Así no se preocupará tanto!”
SILENCE
〘When deed speaks, words are nothing.〙
"Pienso" (thistle) ❀ ≫Escribo (orchid)
¡Visita El rincón de traducción de Taekūran!
〘When deed speaks, words are nothing.〙
"Pienso" (thistle) ❀ ≫Escribo (orchid)
¡Visita El rincón de traducción de Taekūran!