5/08/2017, 17:59
(Última modificación: 6/08/2017, 13:17 por Uchiha Akame.)
Al Uchiha le tranquilizó en cierto modo ver cómo aquella chica parecía tan nerviosa como él. Mientras Akame recogía las bolsas de comida de la kunoichi, ella hacía lo propio con sus libros. «Por Tsukiyomi, esto se parece al inicio de más de una historia picante...» Al instante se sonrojó aun más por haber pensado en aquello, y trató de disimularlo agachándose todavía más.
Una vez recogió todas las bolsas y Koko todos sus libros, Akame se las ofreció como si estuviesen haciendo un intercambio.
—Gracias, Kageya... Koko-san —se corrigió el Uchiha, forzando una sonrisa nerviosa—. Y gracias por lo del combate, eh, uh, espero que te estés recuperando bien.
Aquella era la primera vez que había peleado tan en serio contra alguien; y el hecho de que Koko fuese de su propia Aldea le infundía confianza. No pudo evitar que sus ojos se desviaran a las quemaduras que la kunoichi lucía con dolor.
—Y, eh, bueno... ¿Te duele mucho?
«Uchiha Akame boca de jarra, ¿qué clase de pregunta es esa? ¡Ha recibido el impacto de una técnica de Katon de rango A, pues claro que le duele, idiota!»
—Veo que estas aprovisionándote para coger fuerzas... Eh... ¡Bien! Así seguro que te recuperas antes —balbuceó luego, tratando de arreglarlo—. Aunque esto... No es muy sano, ¿no?
Una vez recogió todas las bolsas y Koko todos sus libros, Akame se las ofreció como si estuviesen haciendo un intercambio.
—Gracias, Kageya... Koko-san —se corrigió el Uchiha, forzando una sonrisa nerviosa—. Y gracias por lo del combate, eh, uh, espero que te estés recuperando bien.
Aquella era la primera vez que había peleado tan en serio contra alguien; y el hecho de que Koko fuese de su propia Aldea le infundía confianza. No pudo evitar que sus ojos se desviaran a las quemaduras que la kunoichi lucía con dolor.
—Y, eh, bueno... ¿Te duele mucho?
«Uchiha Akame boca de jarra, ¿qué clase de pregunta es esa? ¡Ha recibido el impacto de una técnica de Katon de rango A, pues claro que le duele, idiota!»
—Veo que estas aprovisionándote para coger fuerzas... Eh... ¡Bien! Así seguro que te recuperas antes —balbuceó luego, tratando de arreglarlo—. Aunque esto... No es muy sano, ¿no?