23/09/2017, 19:49
Era ahora o nunca, la respuesta que Akame le proporcionase decidiría algo sumamente importante, al menos para la rubia, quien días atrás se había tomado las molestias de reconfortar y escuchar al chico a pesar de prácticamente no conocerle de nada y rostizarla viva.
La última vez ella se había dedicado a escuchar, pero esta vez no se iría del lugar sin una respuesta clara, sea sí o no, insistiría tanto como fuese necesario así terminase llorando.
Al alejarse de él y no ver ninguna reacción, comenzó a mentalizarse, a prepararse para lo peor, para el rechazo que suponía le tendría que haber llegado ni bien empezaron a hablar y…
—Sí, Koko-san —fue la respuesta que recibió teniéndole prácticamente encima, tanto que podía sentir la respiración del contrario e incluso sus pechos habían entrado en contacto directo con el torso desnudo del chico.
Esa era la claridad que ella esperaba en la respuesta, pero a esas alturas ya había sacado la conclusión de que la iban a rechazar y por ello su sorpresa fue inmensa cuando recibió aquel beso fugaz. Sus ojos permanecían abiertos de par en par.
«O sea que… ¿Somos…? »Pensaba incrédula sin ser capaz de reaccionar. Hasta que el Uchiha continuó, sacándole una risilla a la kunoichi.
Justo después de aquello, la joven se dio el lujo de corresponder al abrazo rodeándole el cuello con ambos brazos para apegarse lo más posible y también, corresponder al beso con la misma pasión que el contrario.
Lamentablemente, la falta de experiencia probablemente le jugaría en contra y Akame podría notar que la chica era algo torpe a la hora de mover sus labios. Pero al menos lo intentaba.
La última vez ella se había dedicado a escuchar, pero esta vez no se iría del lugar sin una respuesta clara, sea sí o no, insistiría tanto como fuese necesario así terminase llorando.
Al alejarse de él y no ver ninguna reacción, comenzó a mentalizarse, a prepararse para lo peor, para el rechazo que suponía le tendría que haber llegado ni bien empezaron a hablar y…
—Sí, Koko-san —fue la respuesta que recibió teniéndole prácticamente encima, tanto que podía sentir la respiración del contrario e incluso sus pechos habían entrado en contacto directo con el torso desnudo del chico.
Esa era la claridad que ella esperaba en la respuesta, pero a esas alturas ya había sacado la conclusión de que la iban a rechazar y por ello su sorpresa fue inmensa cuando recibió aquel beso fugaz. Sus ojos permanecían abiertos de par en par.
«O sea que… ¿Somos…? »Pensaba incrédula sin ser capaz de reaccionar. Hasta que el Uchiha continuó, sacándole una risilla a la kunoichi.
Justo después de aquello, la joven se dio el lujo de corresponder al abrazo rodeándole el cuello con ambos brazos para apegarse lo más posible y también, corresponder al beso con la misma pasión que el contrario.
Lamentablemente, la falta de experiencia probablemente le jugaría en contra y Akame podría notar que la chica era algo torpe a la hora de mover sus labios. Pero al menos lo intentaba.