1/10/2017, 19:17
—Mogura, ten mucho cuidado. Hay una delgada línea entre que me caigas bien, y que decida partirte la cara a trompazos por, ya sabes, poner en duda mis habilidades.
Los ojos de Kaido se enfrentarían a los de Mogura, sus coloridos orbes aguamarina contra los serios ojos café del médico. Su mirada ni él cederían ante las palabras del gyojin. No había que ser muy inteligente para darse cuenta de que el comentario del muchacho de cabello azabache había picado al azulado chico. Durante el par de segundos que duró el momento, el abanico siguió llevando viento fresco a su dueño.
Pero vale, puede que no fuera a ser tan estrepitosa como bien hubiese querido. Teniendo en cuenta que a pesar de haberle hecho daño, su cuerpo parecía no exteriorizarlo. Es una habilidad bastante molesta, al igual que la mía.
Casi como le había sucedido a él en su combate contra Aiko, la kunoichi no parecía demostrar signos de debilidad incluso después de recibir ataques. Kaido haría una acotación sobre lo molesto que resultó esa habilidad y se reflejaría en ese pensamiento. Él también tenía una habilidad molesta.
Dime, Mogu-san: ¿qué conoces acerca de los Hōzuki?
No he tenido oportunidad de aprender mucho sobre ellos, supongo que se lo que podría llegar a saber cualquiera.
Apresuraría a contestar Mogura. No estaba seguro de a donde quería llegar el chico con aquella pregunta, pero tuvo que preguntar.
¿Por qué lo preguntas, Umikiba-san?
Los ojos de Kaido se enfrentarían a los de Mogura, sus coloridos orbes aguamarina contra los serios ojos café del médico. Su mirada ni él cederían ante las palabras del gyojin. No había que ser muy inteligente para darse cuenta de que el comentario del muchacho de cabello azabache había picado al azulado chico. Durante el par de segundos que duró el momento, el abanico siguió llevando viento fresco a su dueño.
Pero vale, puede que no fuera a ser tan estrepitosa como bien hubiese querido. Teniendo en cuenta que a pesar de haberle hecho daño, su cuerpo parecía no exteriorizarlo. Es una habilidad bastante molesta, al igual que la mía.
Casi como le había sucedido a él en su combate contra Aiko, la kunoichi no parecía demostrar signos de debilidad incluso después de recibir ataques. Kaido haría una acotación sobre lo molesto que resultó esa habilidad y se reflejaría en ese pensamiento. Él también tenía una habilidad molesta.
Dime, Mogu-san: ¿qué conoces acerca de los Hōzuki?
No he tenido oportunidad de aprender mucho sobre ellos, supongo que se lo que podría llegar a saber cualquiera.
Apresuraría a contestar Mogura. No estaba seguro de a donde quería llegar el chico con aquella pregunta, pero tuvo que preguntar.
¿Por qué lo preguntas, Umikiba-san?
Hablo - Pienso