1/11/2017, 12:01
Ambas se dirigieron a la cola que avanzaba a bastante más velocidad de lo que Eri había imaginado. No estaba mal, la verdad, parecía que los jueces se lo tomaban en serio. Se llevó una mano a la nuca, y logró acariciar un poco su flauta, anhelando su momento sobre el escenario.
—¿Todas estas personas van a participar?
La voz de su acompañante la sacó de sus pensamientos y se obligó a dejar de acariciar su instrumento para mirarla y mostrarle una sonrisa. Luego miró a la cola y se encogió un poco de hombros.
—Puede —dijo la joven mientras viajaba por las caras —o mejor dicho, nucas— de las personas que tenía delante —. Algunas simplemente se apuntarán porque se aburren, piensa que es una ciudad grande y conocida. El problema será el tiempo, supongo que nos llevará un par de horas subir al escenario —alegó la joven con la sonrisa ya casi desaparecida. Ahora su rostro parecía serio, imaginando y calculando cuantas personas podrían participar antes que ella. No le importaba mucho, pero el estado en el que se encontraba Ayame no les dejaría mucho margen, era participar pronto o...
Negó con la cabeza, no quería pensar en eso.
—No te preocupes, Ayame-san, seguro que lo hacemos muy bien —intentó tranquilizar la kunoichi —. Si quieres podemos ir a por unos antifaces o algo, así no nos reconocerán, por si te sientes más tranquila.
—¿Todas estas personas van a participar?
La voz de su acompañante la sacó de sus pensamientos y se obligó a dejar de acariciar su instrumento para mirarla y mostrarle una sonrisa. Luego miró a la cola y se encogió un poco de hombros.
—Puede —dijo la joven mientras viajaba por las caras —o mejor dicho, nucas— de las personas que tenía delante —. Algunas simplemente se apuntarán porque se aburren, piensa que es una ciudad grande y conocida. El problema será el tiempo, supongo que nos llevará un par de horas subir al escenario —alegó la joven con la sonrisa ya casi desaparecida. Ahora su rostro parecía serio, imaginando y calculando cuantas personas podrían participar antes que ella. No le importaba mucho, pero el estado en el que se encontraba Ayame no les dejaría mucho margen, era participar pronto o...
Negó con la cabeza, no quería pensar en eso.
—No te preocupes, Ayame-san, seguro que lo hacemos muy bien —intentó tranquilizar la kunoichi —. Si quieres podemos ir a por unos antifaces o algo, así no nos reconocerán, por si te sientes más tranquila.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)