25/01/2018, 00:34
Akame se sobresaltó al sentir cómo un brazo le agarraba por la espalda. Sin embargo, pronto se dio cuenta de lo que la mano que había al final del mismo sujetaba; un pergamino de misión con la letra "C" escrita en el sello. Y, a juzgar por la persona a la que pertenecía dicho brazo, el Uchiha tenía una idea muy clara de lo que significaba.
«Lo conseguimos...»
Era su primera misión de rango C, y la habían cumplido con éxito contra viento y marea. Las cosas se habían torcido de una forma inimaginable e, incluso mucho tiempo después, probablemente ninguno llegaría a entender completamente lo que había ocurrido en aquel pequeño pueblo de las Planicies del Silencio llamado Ichiban.
Akame sintió cómo a su lado Datsue se ponía en pie, eufórico, y abrazaba a Eri. Él también quiso hacerlo, pero reprimió esas ganas y se limitó a bajar la mirada, con una sonrisa de oreja a oreja. Bebió un sorbo de té para disimularlo y añadió sin complejos.
—Creo que formamos un gran equipo. Buen trabajo, Eri-san, Datsue-kun.
¿Les esperaban más aventuras en el futuro?
Sólo el tiempo lo diría...
«Lo conseguimos...»
Era su primera misión de rango C, y la habían cumplido con éxito contra viento y marea. Las cosas se habían torcido de una forma inimaginable e, incluso mucho tiempo después, probablemente ninguno llegaría a entender completamente lo que había ocurrido en aquel pequeño pueblo de las Planicies del Silencio llamado Ichiban.
Akame sintió cómo a su lado Datsue se ponía en pie, eufórico, y abrazaba a Eri. Él también quiso hacerlo, pero reprimió esas ganas y se limitó a bajar la mirada, con una sonrisa de oreja a oreja. Bebió un sorbo de té para disimularlo y añadió sin complejos.
—Creo que formamos un gran equipo. Buen trabajo, Eri-san, Datsue-kun.
¿Les esperaban más aventuras en el futuro?
Sólo el tiempo lo diría...