5/03/2018, 15:45
Riko se había acercado a Jin, tratando de levantarlo para ponerse en marcha y buscar el resto de las piezas pero antes de que fuera capaz de hacer nada, unas sogas aparecieron de la nada y atraparon al muchacho y apenas unas décimas de segundo después algo rodeó al peliblanco, estampándolo con fuerza contra la pared.
— ¡AAAARG!
No pudo hacer más que gritar de dolor, la respiración se le cortó de golpe y empezó a tratar de coger aire a grandes bocanadas, adolorido. Pudo ver como una figura apareció delante de Ayame, la única de los cuatro que había quedado libre de ataduras y cómo ésta tuvo que tomar la elección de salir ella sola o ayudarlos y salir juntos y su respuesta fue tratar de apuñalar a la figura que tenía enfrente, desapareciendo momentos después junto a la kunoichi.
— ¡Ayame!
Riko no podía hablar sin sentir aquel punzante dolor, por lo que calló mientras Juro se removía en su sitio.
— Por alguna razón, mi pieza esta afilada. Yo me encargo. No entiendo una mierda de lo que acaba de pasar. Pero no quiero creer que Ayame esté muerta. Si está viva, en alguna parte de esta casa... tenemos que encontrarla. Se lo debemos.
Juro cortó las sogas que le sujetaban a la pared y cayó al suelo de rodillas, tosiendo y aún tratando de recuperar la respiración normal, con ambas manos en el punto que le dolía.
— S-Si... Tenemos... Tenemos que encontrarla, ella eligió ayudarnos, tenemos que hacer lo mismo.
El peliblanco trató de incorporarse apoyándose en la pared y vio como Juro se acercaba a Jin y le tendía algo, diciéndole que era maíz. Mientras tanto, El Senju clavó su mirada en la puerta cerrada, estaba seguro que había escuchado algo que venía de ahí, pero no sabía si había sido su imaginación o la situación le había jugado una mala pasada.
— ¡AAAARG!
No pudo hacer más que gritar de dolor, la respiración se le cortó de golpe y empezó a tratar de coger aire a grandes bocanadas, adolorido. Pudo ver como una figura apareció delante de Ayame, la única de los cuatro que había quedado libre de ataduras y cómo ésta tuvo que tomar la elección de salir ella sola o ayudarlos y salir juntos y su respuesta fue tratar de apuñalar a la figura que tenía enfrente, desapareciendo momentos después junto a la kunoichi.
— ¡Ayame!
Riko no podía hablar sin sentir aquel punzante dolor, por lo que calló mientras Juro se removía en su sitio.
— Por alguna razón, mi pieza esta afilada. Yo me encargo. No entiendo una mierda de lo que acaba de pasar. Pero no quiero creer que Ayame esté muerta. Si está viva, en alguna parte de esta casa... tenemos que encontrarla. Se lo debemos.
Juro cortó las sogas que le sujetaban a la pared y cayó al suelo de rodillas, tosiendo y aún tratando de recuperar la respiración normal, con ambas manos en el punto que le dolía.
— S-Si... Tenemos... Tenemos que encontrarla, ella eligió ayudarnos, tenemos que hacer lo mismo.
El peliblanco trató de incorporarse apoyándose en la pared y vio como Juro se acercaba a Jin y le tendía algo, diciéndole que era maíz. Mientras tanto, El Senju clavó su mirada en la puerta cerrada, estaba seguro que había escuchado algo que venía de ahí, pero no sabía si había sido su imaginación o la situación le había jugado una mala pasada.
![[Imagen: tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif]](https://78.media.tumblr.com/ef716a7a224d02d15153150120153d79/tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif)
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»