1/09/2015, 15:44
La pregunta de Kazuma no llegaría ser contestada. Ya que lo único que obtuvo por respuesta fue el aquel típico sonido que hacia la puerta del patio al abrirse.
La situación lo tomo un poco desprevenido, puesto que para cuando se giro en dirección al sonido ya tenía frente a si a una mujer de aspecto disciplinado y con un gran aire de autoconfianza. Aunque estaba un poco confuso, rápidamente llego a la conclusión de que aquella tendría que ser su sensei.
«Wow» —fue lo único que pudo pensar luego de sentir la presencia que transmitía un Jonin.
Cuando se acerco al sitio donde estaban los tres, Nabi no perdió tiempo y procedió a hincarse en el suelo para hacer una reverencia. Los otros chichos solo se quedaron viendo, quizás por que esperaban a que la sensei se presentara o algún otro formalismo similar.
La ninja de elite procedió a darles órdenes rápidamente. Les pidió que se sentaran, y luego de que lo hicieran procedió a darles un minidiscurso que en resumen sería algo similar a “Si quieren abandonar el bote, ahora es el momento”. En vista de que ninguno dio algún reproche, procedió con lo que seguía.
Rápidamente les arrojo a los tres unos pequeños artefactos que resultaban ser unos viejos comunicadores. No les explico para que, ni por qué se los estaba dando, lo único que les dijo fue que los guardaran con cuidado ya que eventualmente los usarían.
Habiendo hecho eso aseguro que harían un ejercicio que tenía como intensión afianzar los lazos del equipo. Dicha actividad consistía en hacer un pequeño resumen de las cosas más personales de cada uno, cosas como su mayor miedo, su peor recuerdo y la persona más querida.
«Que extraño. Normalmente uno pensaría que compartir los buenos recuerdos unirían mejor a un grupo, pero creo que nada afianza mejor a la gente que los males y tragedias en común» —Kazuma pensó aquello con un poco de molestia, pues resultaba ser similar a lo que su maestro le había enseñado antes.
El primero en exponerse fue Juro. De alguna forma se veía un poco nervioso, sin embargo fue rápido y concreto. Explico que ya una vez su padre lo había torturado y por eso le tenía una fobia aguda a lo relacionado a la tortura. También les dijo que su ser más querido era su hermana, a la cual le debía mucho.
«Ya veo, así que lo de no gustarle la tortura era enserio» —fue lo que vino a la mente del peliblanco mientras Juro se quitaba la bufanda para dejar ver sus cicatrices.
Habiendo terminado el joven Eikyu, todas las miradas se centraron en el Ishimura.
—Vale, aquí voy.
—Mi mayor miedo: Creo que le temo a muchas cosas, pero las que más me aterran se que serian dos. Una es perder la cordura o volverme loco —otra cosa que hacía que no le gustara el genjutsu y su capacidad de hacer sentir loca a la gente—, y la otra supongo que sería arrepentirme del camino de vida que he tomado.
—Mi peor recuerdo: Cielos, creo que sería cuando quemaron mi casa. Pasar de ser un joven y adinerado heredero a dormir en una mugrosa cama de orfanato a dormir en la calle, pues bueno eso le fastidia la vida a cualquiera.
—Mi persona más preciada: Eso es difícil, porque serian dos si no me cuento a mí mismo. La primera seria mi maestro, no es que le tenga cariño ni nada, pero a pesar de ser ambicioso e impiadoso, me ha enseñado mucho y de no ser por el quizás aun estuviera en la calle, así como decidiendo si matar a un perro o a un gato para cenar, por eso le respeto mucho. Por otro lado se encuentra Naomi, ella vendría a ser como mí… Niñera o algo así, ya que desde que me acogió, el maestro le ha dado la tarea de cuidarme y velar por mí. No sé si solo será por ordenes del viejo, pero ella es muy amable, paciente, dedicada, preocupada y me apoya en todo. Eso hace que realmente le tenga… Bueno ya saben esas cosas hacen que uno se sienta bien y agradecido.
Para cuando termino de hablar, Kazuma se dio cuenta de que había mantenido su mirada en el suelo, eso a pesar de que había dicho todo aquello sin temblar ni mostrar un ápice de duda o dolor en su voz. Quizás solo fuera la vergüenza que se siente al decir cosas que en general se piensan pero nunca se expresan.
Ahora era el turno de Uchiha Nabi de desnudar su ser ante aquel público expectante.
La situación lo tomo un poco desprevenido, puesto que para cuando se giro en dirección al sonido ya tenía frente a si a una mujer de aspecto disciplinado y con un gran aire de autoconfianza. Aunque estaba un poco confuso, rápidamente llego a la conclusión de que aquella tendría que ser su sensei.
«Wow» —fue lo único que pudo pensar luego de sentir la presencia que transmitía un Jonin.
Cuando se acerco al sitio donde estaban los tres, Nabi no perdió tiempo y procedió a hincarse en el suelo para hacer una reverencia. Los otros chichos solo se quedaron viendo, quizás por que esperaban a que la sensei se presentara o algún otro formalismo similar.
La ninja de elite procedió a darles órdenes rápidamente. Les pidió que se sentaran, y luego de que lo hicieran procedió a darles un minidiscurso que en resumen sería algo similar a “Si quieren abandonar el bote, ahora es el momento”. En vista de que ninguno dio algún reproche, procedió con lo que seguía.
Rápidamente les arrojo a los tres unos pequeños artefactos que resultaban ser unos viejos comunicadores. No les explico para que, ni por qué se los estaba dando, lo único que les dijo fue que los guardaran con cuidado ya que eventualmente los usarían.
Habiendo hecho eso aseguro que harían un ejercicio que tenía como intensión afianzar los lazos del equipo. Dicha actividad consistía en hacer un pequeño resumen de las cosas más personales de cada uno, cosas como su mayor miedo, su peor recuerdo y la persona más querida.
«Que extraño. Normalmente uno pensaría que compartir los buenos recuerdos unirían mejor a un grupo, pero creo que nada afianza mejor a la gente que los males y tragedias en común» —Kazuma pensó aquello con un poco de molestia, pues resultaba ser similar a lo que su maestro le había enseñado antes.
El primero en exponerse fue Juro. De alguna forma se veía un poco nervioso, sin embargo fue rápido y concreto. Explico que ya una vez su padre lo había torturado y por eso le tenía una fobia aguda a lo relacionado a la tortura. También les dijo que su ser más querido era su hermana, a la cual le debía mucho.
«Ya veo, así que lo de no gustarle la tortura era enserio» —fue lo que vino a la mente del peliblanco mientras Juro se quitaba la bufanda para dejar ver sus cicatrices.
Habiendo terminado el joven Eikyu, todas las miradas se centraron en el Ishimura.
—Vale, aquí voy.
—Mi mayor miedo: Creo que le temo a muchas cosas, pero las que más me aterran se que serian dos. Una es perder la cordura o volverme loco —otra cosa que hacía que no le gustara el genjutsu y su capacidad de hacer sentir loca a la gente—, y la otra supongo que sería arrepentirme del camino de vida que he tomado.
—Mi peor recuerdo: Cielos, creo que sería cuando quemaron mi casa. Pasar de ser un joven y adinerado heredero a dormir en una mugrosa cama de orfanato a dormir en la calle, pues bueno eso le fastidia la vida a cualquiera.
—Mi persona más preciada: Eso es difícil, porque serian dos si no me cuento a mí mismo. La primera seria mi maestro, no es que le tenga cariño ni nada, pero a pesar de ser ambicioso e impiadoso, me ha enseñado mucho y de no ser por el quizás aun estuviera en la calle, así como decidiendo si matar a un perro o a un gato para cenar, por eso le respeto mucho. Por otro lado se encuentra Naomi, ella vendría a ser como mí… Niñera o algo así, ya que desde que me acogió, el maestro le ha dado la tarea de cuidarme y velar por mí. No sé si solo será por ordenes del viejo, pero ella es muy amable, paciente, dedicada, preocupada y me apoya en todo. Eso hace que realmente le tenga… Bueno ya saben esas cosas hacen que uno se sienta bien y agradecido.
Para cuando termino de hablar, Kazuma se dio cuenta de que había mantenido su mirada en el suelo, eso a pesar de que había dicho todo aquello sin temblar ni mostrar un ápice de duda o dolor en su voz. Quizás solo fuera la vergüenza que se siente al decir cosas que en general se piensan pero nunca se expresan.
Ahora era el turno de Uchiha Nabi de desnudar su ser ante aquel público expectante.
![[Imagen: aab687219fe81b12d60db220de0dd17c.gif]](https://i.pinimg.com/originals/aa/b6/87/aab687219fe81b12d60db220de0dd17c.gif)