18/07/2018, 18:40
(Última modificación: 18/07/2018, 18:42 por Inuzuka Nabi.)
—Y esa es la historia de como Uchiha Datsue el Intrépido volvió al último eslabón de la cadena alimenticia
No pude evitar reírme, lo cual dejó a Stuffy algo consternado ya que para él no habíamos hecho más que quedarnos paraos un rato y estaba más perdido que un Kuseño en una civilización de verdad. Apoyé mi mano en el hombro de Datsue, haciendole ver que tenía todo mi apoyo.
— Bienvenido al reino de los Genins. Un lugar lleno de libertad y sin responsabilidad ni esas mierdas. Aunque no puedo evitar sentir que hay algo tremendamente extraño en todo esto... ¿De verdad que no estamos en guerra? Es decir, un kage mandandole a otro una bomba es una declaración de guerra. No me digas que Hanabi no va a hacer nada. Y todo ¿por qué? Por un par de bromas. Estos amenios son demasiado serios, macho. ¿Qué piensas hacer, Datsue? Olvidarlo y pasar página suena a algo totalmente contrario a ti.
Tenía demasiadas dudas en la cabeza y todas salían al mismo tiempo. Pero no era para menos, había visto por lo menos tres o cuatro momentos en la ilusión en los que podría haber reventado una guerra mundial perfectamente. Y, sin embargo, aquí estábamos todos, tan tranquilos. Me sentía con medio pie en la guerra ya, después de lo que me había enseñado Datsue, no era para menos.
No pude evitar reírme, lo cual dejó a Stuffy algo consternado ya que para él no habíamos hecho más que quedarnos paraos un rato y estaba más perdido que un Kuseño en una civilización de verdad. Apoyé mi mano en el hombro de Datsue, haciendole ver que tenía todo mi apoyo.
— Bienvenido al reino de los Genins. Un lugar lleno de libertad y sin responsabilidad ni esas mierdas. Aunque no puedo evitar sentir que hay algo tremendamente extraño en todo esto... ¿De verdad que no estamos en guerra? Es decir, un kage mandandole a otro una bomba es una declaración de guerra. No me digas que Hanabi no va a hacer nada. Y todo ¿por qué? Por un par de bromas. Estos amenios son demasiado serios, macho. ¿Qué piensas hacer, Datsue? Olvidarlo y pasar página suena a algo totalmente contrario a ti.
Tenía demasiadas dudas en la cabeza y todas salían al mismo tiempo. Pero no era para menos, había visto por lo menos tres o cuatro momentos en la ilusión en los que podría haber reventado una guerra mundial perfectamente. Y, sin embargo, aquí estábamos todos, tan tranquilos. Me sentía con medio pie en la guerra ya, después de lo que me había enseñado Datsue, no era para menos.
—Nabi—