10/01/2019, 02:16
Oh, sí, Datsue había estado allí.
Si la memoria no le fallaba, la primera vez había sido con Noemi. Había sido breve, su encuentro, porque se habían cruzado de casualidad. Él había ido a la aventura, en un viaje de ocio, y ella, a devolverle los pantalones. Entre otras cosas menores, claro. Al final, habían terminado como siempre: a grito pelado y echándose cosas a la cara. Y una piedra a la cabeza, ahora que Datsue recordaba.
En la segunda, había pasado exactamente por el mismo sitio —el cual conocería luego como el Cañón del Secuestrado—. Había sido con Koko, tras una misión en Notsuba. Prefirió no seguir ahondando en aquella vivencia, de cuyo trágico final no quería ni acordarse.
La tercera había sido en la Torre de Meditación. Junto a su Hermano, trazando líneas en un mapa gracias a su Sello de Rastreo para localizar Amegakure. Buena misión, aquella. Importante para Uzu, pero apostaba a que mucho más sencilla que la que tenía entre manos.
—Uau, esto es impresionante —comentó, maravillándose como si fuese la primera vez que estaba allí. Para Gūzen, así era—. Es más bonito que en las postales —bromeó.
Si la memoria no le fallaba, la primera vez había sido con Noemi. Había sido breve, su encuentro, porque se habían cruzado de casualidad. Él había ido a la aventura, en un viaje de ocio, y ella, a devolverle los pantalones. Entre otras cosas menores, claro. Al final, habían terminado como siempre: a grito pelado y echándose cosas a la cara. Y una piedra a la cabeza, ahora que Datsue recordaba.
En la segunda, había pasado exactamente por el mismo sitio —el cual conocería luego como el Cañón del Secuestrado—. Había sido con Koko, tras una misión en Notsuba. Prefirió no seguir ahondando en aquella vivencia, de cuyo trágico final no quería ni acordarse.
La tercera había sido en la Torre de Meditación. Junto a su Hermano, trazando líneas en un mapa gracias a su Sello de Rastreo para localizar Amegakure. Buena misión, aquella. Importante para Uzu, pero apostaba a que mucho más sencilla que la que tenía entre manos.
—Uau, esto es impresionante —comentó, maravillándose como si fuese la primera vez que estaba allí. Para Gūzen, así era—. Es más bonito que en las postales —bromeó.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado