5/02/2019, 00:51
«¡La madre que me parió, joder! ¡La madre que me parió!»
Kitana no comprendía la gravedad de la situación. Su hermana, la misma que se pasaba el día tirándose de cabeza ante la mínima oportunidad que se le presentaba para escapar, no estaba en la habitación.
No…
…estaba.
—Kitana, creo que no… Bah —Había visto a demasiados borrachos en su vida como para no saber que era imposible razonar con ellos. La ayudó a acostarse en la cama, se despidió rápidamente de ella y cerró la puerta con la llave.
Cada minuto contaba.
Bajó corriendo por las escaleras y preguntó en recepción si habían visto a Urami volver —no era una chica que precisamente pasase desapercibida—. De no ser así —cosa de la que estaba prácticamente convencido—, correría de vuelta al restaurante para preguntar a cada camarero si habían visto la dirección en la que se había ido la buenorra quinceañera.
Kitana no comprendía la gravedad de la situación. Su hermana, la misma que se pasaba el día tirándose de cabeza ante la mínima oportunidad que se le presentaba para escapar, no estaba en la habitación.
No…
…estaba.
—Kitana, creo que no… Bah —Había visto a demasiados borrachos en su vida como para no saber que era imposible razonar con ellos. La ayudó a acostarse en la cama, se despidió rápidamente de ella y cerró la puerta con la llave.
Cada minuto contaba.
Bajó corriendo por las escaleras y preguntó en recepción si habían visto a Urami volver —no era una chica que precisamente pasase desapercibida—. De no ser así —cosa de la que estaba prácticamente convencido—, correría de vuelta al restaurante para preguntar a cada camarero si habían visto la dirección en la que se había ido la buenorra quinceañera.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado