30/04/2019, 01:16
Daruu refunfuñó unas palabras que ni para Ayame ni para cualquier habitante del planeta hubieran tenido ni el más mínimo sentido, y se acercó con pasitos tímidos al hombre del tupido bigote y el delantal. Se aclaró la voz, y con toda la dignidad que le quedaba —descendiendo a diez kilodignidades por segundo— dijo:
—¡Hola! No sé si nos hemos visto porque yo seguramente sería muy pequeño, pero soy Amedama Daruu, el hijo de Kiroe. Necesitábamos una habitación para pasar unos días indeterminados, y pensé que...
—¡Hola! No sé si nos hemos visto porque yo seguramente sería muy pequeño, pero soy Amedama Daruu, el hijo de Kiroe. Necesitábamos una habitación para pasar unos días indeterminados, y pensé que...
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)