5/05/2019, 21:14
Qué pregunta tan extraña, esa. ¿Tan poca estima tenía por el pescado que incluso hasta el olor le desagradaba?
—Pues mira, realmente todos tienen su olorcillo particular. Como siempre llueve, la humedad se mantiene abajo y conserva los olores. Pero hay uno en particular en el que impera el aroma del mar, sabes. Le llaman la Pasarela del Boquerón. Una cuadra entera llena de depósitos de distribución para todos los mercaderes que transportan las grandes pescas desde Coladragón y viceversa. ¡Estuve a punto de comprar una parcela de tierra muy cerca de ahí para montar un hotelucho y expandir la cadena de la bruma hacia los sectores menos populares! pero buah, el aroma es fortísimo, sobre todo en las noches. Estaba a precio de ganga, pero parece que a los negocios aledaños no les va muy bien precisamente por eso.
—Pues mira, realmente todos tienen su olorcillo particular. Como siempre llueve, la humedad se mantiene abajo y conserva los olores. Pero hay uno en particular en el que impera el aroma del mar, sabes. Le llaman la Pasarela del Boquerón. Una cuadra entera llena de depósitos de distribución para todos los mercaderes que transportan las grandes pescas desde Coladragón y viceversa. ¡Estuve a punto de comprar una parcela de tierra muy cerca de ahí para montar un hotelucho y expandir la cadena de la bruma hacia los sectores menos populares! pero buah, el aroma es fortísimo, sobre todo en las noches. Estaba a precio de ganga, pero parece que a los negocios aledaños no les va muy bien precisamente por eso.