17/05/2019, 15:41
Yamatsuki le mostró la palma de la mano, pidiéndole que esperase mientras ella recobraba el aliento.
—Ariba, deja de meterte en fregaos, joder. Siempre tengo que sacartr las castañas del fuego. —La mujer miró a su compañero con una mirada elocuente que pareció decir aquí no. Luego, con cautela, abandonó el callejón y se dirigió hacia el norte. Lejos de aquellos barrios con tan mala pinta. Fue intercalando callejones, y cambiando de transformación al menos en tres ocasiones.
Para cuando llegaron al Corredor de Luciérnagas, volvían a ser ellos mismos. Pero aún así Daruu aguardó hasta que consiguieron refugiarse en la soledad de su habitación.
—Es allí, da igual que vieras más o menos. Ya tenemos el sitio, y la hija de puta salió de la bodega. Comienza la siguiente fase del plan.
»Ya nos hemos metido demasiado en la boca del lobo hoy. Por ahora, debemos dejar pasar unos días. Que las sospechas que hemos levantado se disipen. Que parezca lo que hemos pretendido que parezca: que dos extraños han escapado aterrorizados porque no tenían dinero para invitar a Naoka. Y ya está.
»Luego, vigilaremos los alrededores y seguiremos a la tipa esta, cuando salga, tratando de pillarla en un sitio solitario. La reduciremos y la interrogaremos. Y luego...
Daruu se dio la vuelta y se acercó a la ventana.
—Luego que le rece a Amenokami, porque su vida habrá acabado. —Abrió la ventana—. Ahora a esperar a mis gatos. A ver si han averiguado más cosas.
—Ariba, deja de meterte en fregaos, joder. Siempre tengo que sacartr las castañas del fuego. —La mujer miró a su compañero con una mirada elocuente que pareció decir aquí no. Luego, con cautela, abandonó el callejón y se dirigió hacia el norte. Lejos de aquellos barrios con tan mala pinta. Fue intercalando callejones, y cambiando de transformación al menos en tres ocasiones.
Para cuando llegaron al Corredor de Luciérnagas, volvían a ser ellos mismos. Pero aún así Daruu aguardó hasta que consiguieron refugiarse en la soledad de su habitación.
—Es allí, da igual que vieras más o menos. Ya tenemos el sitio, y la hija de puta salió de la bodega. Comienza la siguiente fase del plan.
»Ya nos hemos metido demasiado en la boca del lobo hoy. Por ahora, debemos dejar pasar unos días. Que las sospechas que hemos levantado se disipen. Que parezca lo que hemos pretendido que parezca: que dos extraños han escapado aterrorizados porque no tenían dinero para invitar a Naoka. Y ya está.
»Luego, vigilaremos los alrededores y seguiremos a la tipa esta, cuando salga, tratando de pillarla en un sitio solitario. La reduciremos y la interrogaremos. Y luego...
Daruu se dio la vuelta y se acercó a la ventana.
—Luego que le rece a Amenokami, porque su vida habrá acabado. —Abrió la ventana—. Ahora a esperar a mis gatos. A ver si han averiguado más cosas.
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)