7/08/2019, 23:30
Mogura también le restó importancia al asunto, y así los tres se propusieron la tarea de hacer una ronda a la gran máquina, justo cuando Eri abrió la primera puerta...
Lo que recibió en la cara, sin embargo, solo la hizo parpadear un par de veces, y se sobresaltó al escuchar una voz a su espalda.
—¡Eri, ten cuidado, por favor!
Justo en ese instante pudo comprobar que ambos vagones no estaban completamente conectados, sino que entre ellos había algo que los enganchaba. Eri miró hacia abajo y tragó algo de saliva, había que ir con cuidado si no querían acabar pegados en las vías del tren.
—Prestad atención por donde pisáis chicos —dijo ella a la par que contestaba a la súplica de Ayame mientras señalaba hacia abajo. Luego con cuidado procedió a intentar pasar al siguiente vagón intentando no caerse en el proceso.
Lo que recibió en la cara, sin embargo, solo la hizo parpadear un par de veces, y se sobresaltó al escuchar una voz a su espalda.
—¡Eri, ten cuidado, por favor!
Justo en ese instante pudo comprobar que ambos vagones no estaban completamente conectados, sino que entre ellos había algo que los enganchaba. Eri miró hacia abajo y tragó algo de saliva, había que ir con cuidado si no querían acabar pegados en las vías del tren.
—Prestad atención por donde pisáis chicos —dijo ella a la par que contestaba a la súplica de Ayame mientras señalaba hacia abajo. Luego con cuidado procedió a intentar pasar al siguiente vagón intentando no caerse en el proceso.