28/08/2019, 03:11
Mientras Daruu y Ayame intercambiaban opiniones, la sombra de Shanise se movía inquieta por toda la habitación, traspasando los muebles, de aquí a allá. Llegado un punto infranqueable de introspección, se dio vuelta, de nuevo, y miró a los dos ninja.
—Pero esa desviación de la que hablas debe tener algún sustento. Tiene que haber una credibilidad detrás de algún cebo. Es decir, sabemos que las Náyades pueden tener muchos enemigos. ¿Pero a cuál le presentamos? —soltó como quien no quiere la cosa—. pensemos: ¿qué haría que las Náyades abandonen el nido, pero no para huir; sino para cazar?
A todos les daba la impresión de que Daruu, y sólo Daruu, sabría esa respuesta.
—Pero esa desviación de la que hablas debe tener algún sustento. Tiene que haber una credibilidad detrás de algún cebo. Es decir, sabemos que las Náyades pueden tener muchos enemigos. ¿Pero a cuál le presentamos? —soltó como quien no quiere la cosa—. pensemos: ¿qué haría que las Náyades abandonen el nido, pero no para huir; sino para cazar?
A todos les daba la impresión de que Daruu, y sólo Daruu, sabría esa respuesta.