15/09/2019, 19:34
Kiroe paseaba curiosa por la taberna mientras escuchaba la respuesta de la ciega. Pero su réplica no le resultaría satisfactoria. La mujer levantó una pierna, la posó en una de las mesas y la pateó, volcándola, tirando todos los trastos de cristal que había encima, y de nuevo armando todo el jaleo del que era capaz. Estampó sus manos sobre la barra.
—Se lo voy a poner muy simple, para que usted lo entienda perfectamente —expuso—. O llama a Nakura Naia o alguna de sus putas y le dice que me lleve ante ella, o me hago paso yo misma hacia dentro de la taberna para buscarla. —Habló despacio cuando añadió—: no le garantizo que salga bien parada si cumple lo que digo, pero si no lo cumple, antes de entrar la consideraré un obstáculo en mi camino. No me gustan los obstáculos.
—Se lo voy a poner muy simple, para que usted lo entienda perfectamente —expuso—. O llama a Nakura Naia o alguna de sus putas y le dice que me lleve ante ella, o me hago paso yo misma hacia dentro de la taberna para buscarla. —Habló despacio cuando añadió—: no le garantizo que salga bien parada si cumple lo que digo, pero si no lo cumple, antes de entrar la consideraré un obstáculo en mi camino. No me gustan los obstáculos.
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)