25/03/2020, 20:33
— ¿Qué criaturas? — dijo una miedosa Hana.
— Uuuhmm... — se arqueó un poco y su rostro se ensombreció, acariciando ambos hombros con las manos opuestas a cada uno, desviándole la mirada a la rubia de Uzu con una mezcla de miedo y preocupación. — Supongo que lo sabes; sobretodo por eso creo que hay tanto alboroto... Son como unas especies de monstruos... Dicen que tienen como partes de varios animales; el que yo encontré era como un felino. Pero exageradamente desagradable, todo en él tenía un aspecto... No se como describirlo...
Ahora la atención de ella cayó sobre la calle. Si una criatura así, o varias de estas, sin importar la escala asediaran aquellas calles ¿Que sería de los habitantes? Si, todos los cuerpos y rangos militares actuarían en seguida, pero seguiría sin haber respuesta del precio a pagar. El leve pensamiento de aquello, él daba escalofríos y le podía llegar a quitar el sueño si seguía dándole vueltas. ¿Que sería de ella? ¿Y que sería de Hana? La miró preocupada, nunca la había visto combatir, no tenía ni la más remota idea de que habilidades para el combate tenía. La última vez estaba desvalida y dolorida, y haciendo memoria del combate con aquella criatura, Ren sabía que no sería capaz de ocuparse de un monstruo como aquel por su cuenta; Hana le parecía tan frágil y delicada, como una gentil rosa.
— Uuuhmm... — se arqueó un poco y su rostro se ensombreció, acariciando ambos hombros con las manos opuestas a cada uno, desviándole la mirada a la rubia de Uzu con una mezcla de miedo y preocupación. — Supongo que lo sabes; sobretodo por eso creo que hay tanto alboroto... Son como unas especies de monstruos... Dicen que tienen como partes de varios animales; el que yo encontré era como un felino. Pero exageradamente desagradable, todo en él tenía un aspecto... No se como describirlo...
Ahora la atención de ella cayó sobre la calle. Si una criatura así, o varias de estas, sin importar la escala asediaran aquellas calles ¿Que sería de los habitantes? Si, todos los cuerpos y rangos militares actuarían en seguida, pero seguiría sin haber respuesta del precio a pagar. El leve pensamiento de aquello, él daba escalofríos y le podía llegar a quitar el sueño si seguía dándole vueltas. ¿Que sería de ella? ¿Y que sería de Hana? La miró preocupada, nunca la había visto combatir, no tenía ni la más remota idea de que habilidades para el combate tenía. La última vez estaba desvalida y dolorida, y haciendo memoria del combate con aquella criatura, Ren sabía que no sería capaz de ocuparse de un monstruo como aquel por su cuenta; Hana le parecía tan frágil y delicada, como una gentil rosa.