27/03/2020, 18:00
— Entonces yo me pido ser el matorral que hay siempre al lado del árbol. Siempre podemos contar con que a los malos les guste la naturaleza y nos dejen vivir en paz después de su conquista mundial.
Acompaño su risa con una carcajada fútil, todavía algo apenada y afligida; pero ahora el arroz y el pollo le sabían mejor que hace unos momentos, aunque ella no lo hubiera notado.
— Espero que no acabe ocurriendo nada malo... — dijo susurrando a un trozo, antes de comérselo. — En cualquier caso, no me veo con esperanzas de pasar siquiera el primer combate. A saber contra quién me toca.
Seguía siendo algo negativa, pero por lo menos ahora no hablaba de una catástrofe a escala mundial; solo de que seguramente saldría vapuleada contra cualquiera en aquel torneo.
Acompaño su risa con una carcajada fútil, todavía algo apenada y afligida; pero ahora el arroz y el pollo le sabían mejor que hace unos momentos, aunque ella no lo hubiera notado.
— Espero que no acabe ocurriendo nada malo... — dijo susurrando a un trozo, antes de comérselo. — En cualquier caso, no me veo con esperanzas de pasar siquiera el primer combate. A saber contra quién me toca.
Seguía siendo algo negativa, pero por lo menos ahora no hablaba de una catástrofe a escala mundial; solo de que seguramente saldría vapuleada contra cualquiera en aquel torneo.