30/03/2020, 18:11
—¿Un sitio más discreto? —repitió Datsue, claramente confundido, y Ayame reafirmó su petición con un enérgico asentimiento de cabeza—. Bueno, sí. Tienes razón, tienes razón. Uno donde ni los ojos de un Hyūga llegue a vernos. Sí, sí.
—Oye, oye. ¡Ya vale! ¡Que estoy aquí, eh! —exclamó Daruu, cruzándose de brazos, ofendido ante el dicho del Uchiha.
—El restaurante donde nos comimos shabu-shabu la última vez no está muy lejos —sugirió Datsue—. A no ser que queráis probar un sitio nuevo.
Pero antes de que Ayame pudiera decir nada al respecto, Daruu se dio la vuelta, dándoles la espalda.
—Donde queráis. Si queréis os dejo solitos, y así los "ojos de Hyūga" no os ven.
Fue entonces cuando Ayame se dio cuenta de lo que estaba pasando por la cabeza de Daruu. Y sus mejillas se encendieron.
—E... ¡Esperad! —exclamó Ayame, agitando los brazos en el aire— . ¡Daruu, no me refería a ti cuando hablaba de otros ojos! Vamos, no te piques, lo que ha dicho Datsue ha sido una forma de hablar, ¿verdad? —le preguntó directamente, con la súplica brillando en sus ojos.
Otra vez no, por favor. Lo último que deseaba era entrar en una nueva discusión sin sentido. Ya había tenido suficientes en las últimas semanas...
—Oye, oye. ¡Ya vale! ¡Que estoy aquí, eh! —exclamó Daruu, cruzándose de brazos, ofendido ante el dicho del Uchiha.
—El restaurante donde nos comimos shabu-shabu la última vez no está muy lejos —sugirió Datsue—. A no ser que queráis probar un sitio nuevo.
Pero antes de que Ayame pudiera decir nada al respecto, Daruu se dio la vuelta, dándoles la espalda.
—Donde queráis. Si queréis os dejo solitos, y así los "ojos de Hyūga" no os ven.
Fue entonces cuando Ayame se dio cuenta de lo que estaba pasando por la cabeza de Daruu. Y sus mejillas se encendieron.
—E... ¡Esperad! —exclamó Ayame, agitando los brazos en el aire— . ¡Daruu, no me refería a ti cuando hablaba de otros ojos! Vamos, no te piques, lo que ha dicho Datsue ha sido una forma de hablar, ¿verdad? —le preguntó directamente, con la súplica brillando en sus ojos.
Otra vez no, por favor. Lo último que deseaba era entrar en una nueva discusión sin sentido. Ya había tenido suficientes en las últimas semanas...