30/03/2020, 22:58
Ayame y Datsue trataron de excusarse, pero a Daruu tanto secretismo ya le estaba hiriendo. Probablemente fuera alguna tontería de jinchūriki, pero en el fondo al Hyūga le dolía que, siendo una su pareja y otro un amigo muy cercano...
«Un momento, ¿ha dicho...?»
Daruu se dio la vuelta de golpe, con los ojos muy abiertos.
—¿Qué... invitas? —preguntó, acercándose al Uchiha—. ¿Estás bien? ¿Ha pasado algo?
El amejin todavía tenía muy presente la escenita que Datsue protagonizó en la playa de aquella isla desierta, donde dejó claro, con mucho, mucho énfasis, que amaba el dinero. Mucho.
«Un momento, ¿ha dicho...?»
Daruu se dio la vuelta de golpe, con los ojos muy abiertos.
—¿Qué... invitas? —preguntó, acercándose al Uchiha—. ¿Estás bien? ¿Ha pasado algo?
El amejin todavía tenía muy presente la escenita que Datsue protagonizó en la playa de aquella isla desierta, donde dejó claro, con mucho, mucho énfasis, que amaba el dinero. Mucho.