1/04/2020, 22:37
(Última modificación: 1/04/2020, 22:38 por Uzumaki Eri.)
Tan pancho como estaba allí, Datsue afirmó que Daruu le había matado. Una katana en el abdomen que lo atravesó de un lado a otro, desde el pecho a la espalda, y él tan tranquilo, contándolo cual anécdota que se cuenta a los nietos al cobijo del porche de una casa de madera en pleno día primaveral.
«Un corte mal dado es lo que te voy a dar a ti...»
Sin tapujos, mientras Datsue y Hana se murmuraban cosas que a ella ni la iban ni la venían, se acercó al chico y levantó su camiseta sin permiso. Para su sorpresa, no había cicatriz.
—¿Cómo? —preguntó, incrédula.
«Un corte mal dado es lo que te voy a dar a ti...»
Sin tapujos, mientras Datsue y Hana se murmuraban cosas que a ella ni la iban ni la venían, se acercó al chico y levantó su camiseta sin permiso. Para su sorpresa, no había cicatriz.
—¿Cómo? —preguntó, incrédula.