9/04/2020, 21:49
(Última modificación: 9/04/2020, 21:51 por Aotsuki Ayame. Editado 2 veces en total.)
—¿Cómo que una técnica? ¿Y por qué a él y a mí n...
Comenzó a protestar Daruu, pero Ayame ni siquiera tuvo tiempo de responder. La reacción del Uchiha no se hizo esperar:
—¡¿QUUUUUUÉEEEE?! ¿¡UNA
TÉCNICA!?
Ayame tuvo que taparse los oídos. Aunque sólo consiguió taparse uno. Se había olvidado de que no sentía el otro brazo y en consecuencia sólo consiguió pegarse una buena hostia en el lateral de la cabeza.
—¡Auch! ¡Y luego soy yo la chillona! —protestó, indignada.
—¡Me cago en la chorra de Amenokami, macho! ¡Eres un escandaloso!
—¿Y qué técnica es esa? ¿Cómo se llama? ¿Qué hace? ¿Qué elemento? ¿Cómo dices que se llamaba?
En aquella ocasión fue Ayame la que recibió la avalancha de preguntas. El Uchiha parecía haberse olvidado del precario estado en el que se encontraban los tres, porque se había incorporado de golpe y ahora se inclinaba sobre ella con los ojos brillantes. Nunca le había visto así de emocionado y por una parte no pudo evitar sentirse halagada. Por otra...
—No os lo voy a decir hasta que esto se pase —sentenció, volviéndole la cara.
Por otra parte se merecía sufrir un poquito más.
Comenzó a protestar Daruu, pero Ayame ni siquiera tuvo tiempo de responder. La reacción del Uchiha no se hizo esperar:
—¡¿QUUUUUUÉEEEE?! ¿¡UNA
TÉCNICA!?
Ayame tuvo que taparse los oídos. Aunque sólo consiguió taparse uno. Se había olvidado de que no sentía el otro brazo y en consecuencia sólo consiguió pegarse una buena hostia en el lateral de la cabeza.
—¡Auch! ¡Y luego soy yo la chillona! —protestó, indignada.
—¡Me cago en la chorra de Amenokami, macho! ¡Eres un escandaloso!
—¿Y qué técnica es esa? ¿Cómo se llama? ¿Qué hace? ¿Qué elemento? ¿Cómo dices que se llamaba?
En aquella ocasión fue Ayame la que recibió la avalancha de preguntas. El Uchiha parecía haberse olvidado del precario estado en el que se encontraban los tres, porque se había incorporado de golpe y ahora se inclinaba sobre ella con los ojos brillantes. Nunca le había visto así de emocionado y por una parte no pudo evitar sentirse halagada. Por otra...
—No os lo voy a decir hasta que esto se pase —sentenció, volviéndole la cara.
Por otra parte se merecía sufrir un poquito más.