21/05/2020, 00:33
Por suerte para ella, se libró de dar explicaciones; una mujer exigía a aquel enfermero que la acompañase sin perder más tiempo. Ren entonces dirigió toda su atención a Hana, fue a cogerla de la mano, pero al volver a verla se preocupó demasiado; pensando que sus brutas manos podrían romper los dedos de la rubia como si fueran de fina porcelana.
— ¿Eh? — replicó extrañada ante aquellas palabras; salvó una alegría inicia, Hana parecía comportarse de forma extraña, pero no iba a negarle nada a esos ojos de color acaramelado claro. — ¿A-Así está bien? — lo hizo con suma suavidad, y sin levantar las sabanas; solo esperaba no empeorar la situación de la genin aún más.
— ¿Eh? — replicó extrañada ante aquellas palabras; salvó una alegría inicia, Hana parecía comportarse de forma extraña, pero no iba a negarle nada a esos ojos de color acaramelado claro. — ¿A-Así está bien? — lo hizo con suma suavidad, y sin levantar las sabanas; solo esperaba no empeorar la situación de la genin aún más.