26/05/2020, 12:06
Le restó importancia a su contrincante. Un kusareño, había dicho, pero a ella todavía le sabía raro dirigirse a ellos así. Aun así, apoyaba más a Datsue que a la lógica de la Morikage, y su deber era, sin duda, protegerlo. Aunque era capaz de hacerlo solo, claro, ¡solo un mordisco en todo el combate!
—Entonces estás en la final, vaya... —le tocaba contra Daruu—. Te apoyaré con todo lo que tengo, Datsue —levantó el pulgar. Por mucho que le agradara Daruu, ella tenía que ir con su mejor amigo.
—Qué pena que a Hana le tocase contra Reiji. Hubiese sido bonito verles en la gran final
—Al menos está Reiji en la final, con eso ya estamos bien, y Hana ha llegado muy lejos, estoy muy orgullosa, en cambio... —negó, no quería volver a la espiral de depresión que se había creado en torno a ella misma.
Desde el otro lado de la puerta se escuchó un portazo seguido de la voz de su pupila, desde el baño. «Qué oportunos...» Se lamentó en su interior, tomando el pomo de la puerta para pasar. Efectivamente, Hana estaba en el baño.
—¿Qué tal estás? ¿Necesitas ayuda? —preguntó desde el otro lado de la puerta, por si acaso.
—Entonces estás en la final, vaya... —le tocaba contra Daruu—. Te apoyaré con todo lo que tengo, Datsue —levantó el pulgar. Por mucho que le agradara Daruu, ella tenía que ir con su mejor amigo.
—Qué pena que a Hana le tocase contra Reiji. Hubiese sido bonito verles en la gran final
—Al menos está Reiji en la final, con eso ya estamos bien, y Hana ha llegado muy lejos, estoy muy orgullosa, en cambio... —negó, no quería volver a la espiral de depresión que se había creado en torno a ella misma.
Desde el otro lado de la puerta se escuchó un portazo seguido de la voz de su pupila, desde el baño. «Qué oportunos...» Se lamentó en su interior, tomando el pomo de la puerta para pasar. Efectivamente, Hana estaba en el baño.
—¿Qué tal estás? ¿Necesitas ayuda? —preguntó desde el otro lado de la puerta, por si acaso.