5/06/2020, 04:39
«No sé qué le ve la gente al oro: es escandaloso, es caro y solo sirve para adornar», pensó mientras leía una factura que tenía más ceros que con los que hubiese trabajado alguna vez.
El joven peliblanco paso el pergamino a su compañera, para luego sacar de su túnica una pequeña libreta y algo para escribir.
—Ya tengo claro lo sucedido, señor Yōgi, pero aún hay algunas cosas que necesitamos saber —argumento, listo para comenzar con su parte preferida, la de las preguntas—: todo lo que pueda decirnos sobre el “chacal” y todo lo que pueda decirnos sobre las minas.
Suponía que, si aquel sujeto había burlado a los subordinados, y había logrado escapar hasta allí con una herida en la pierna, no se trataba de alguien común; por lo que necesitaba saber que armas, métodos o técnicas utilizo durante el altercado. En cuanto a la mina, quería saber que tan grande era, que peligros le eran propios y si tenían a su disposición algún mapa.
El joven peliblanco paso el pergamino a su compañera, para luego sacar de su túnica una pequeña libreta y algo para escribir.
—Ya tengo claro lo sucedido, señor Yōgi, pero aún hay algunas cosas que necesitamos saber —argumento, listo para comenzar con su parte preferida, la de las preguntas—: todo lo que pueda decirnos sobre el “chacal” y todo lo que pueda decirnos sobre las minas.
Suponía que, si aquel sujeto había burlado a los subordinados, y había logrado escapar hasta allí con una herida en la pierna, no se trataba de alguien común; por lo que necesitaba saber que armas, métodos o técnicas utilizo durante el altercado. En cuanto a la mina, quería saber que tan grande era, que peligros le eran propios y si tenían a su disposición algún mapa.