7/06/2020, 18:18
El ansiado cuerpo a cuerpo que Ren buscaba por fín parecía haber llegado; mientras la nube de polvo se disipaba, sacó el kunai de su espalda, tanteándolo en peso para después arrojarlo detrás de ella. Sin marioneta, y con esperanza de que no le quedasen más triquiñuelas, recogió el bokken que había soltado y camino torpemente hacia él con lentitud.
Ante ella, le quedaban dos opciones, vapulearlo hasta que cayera al suelo o arrojarlo fuera de ring; cosa de la que se acababa de dar cuenta. Sin darse cuenta, puede que ambos, Takumi se había quedado arrinconado ante los límites del ring durante el combate; pero una bestia arrinconada no tiene nada que perder. Pero él no era el único que se sentía arrinconado aunque no fuera por donde estaba.
Alzó su bokken en pose defensiva, y volvió a cargar contra él; cualquiera de las dos opciones, seguían siendo su solución, y era el momento de probar una de ellas. A un escaso metro, la joven mostraría con su mano derecha la bandana de Amegakure hacia su rival, brillando con la misma fuerza del sol para placarle acto seguido.
Ante ella, le quedaban dos opciones, vapulearlo hasta que cayera al suelo o arrojarlo fuera de ring; cosa de la que se acababa de dar cuenta. Sin darse cuenta, puede que ambos, Takumi se había quedado arrinconado ante los límites del ring durante el combate; pero una bestia arrinconada no tiene nada que perder. Pero él no era el único que se sentía arrinconado aunque no fuera por donde estaba.
Alzó su bokken en pose defensiva, y volvió a cargar contra él; cualquiera de las dos opciones, seguían siendo su solución, y era el momento de probar una de ellas. A un escaso metro, la joven mostraría con su mano derecha la bandana de Amegakure hacia su rival, brillando con la misma fuerza del sol para placarle acto seguido.