16/06/2020, 11:13
Hana cogió la mano de su hermana con delicadeza y empezó a andar hacia el lago. Sin prisa pero sin pausa se abrió camino con cuidado de que no le rebotase ninguna rama a Ren entre los matorrales hasta llegar al camino. Una vez en el camino, apenas tardaron unos minutos en llegar al lago.
Hasta aquel momento nunca se había percatado de los pequeños farolillos que había en la baranda del puente y que iluminaban durante la noche. Estaban separados entre ellos por una distancia muy razonable por lo que la luz que ofrecían era algo tenue, la justa para poder ver donde pisas con claridad.
Sobre la superficie del lago, donde ya no llegaba la luz de los farolillos, se acumulaban pequeños puntos brillantes. Desde la distancia apenas podía distinguirse su forma, solo eran puntos. Hana entrecerró los ojos, intentando descubrir de donde salían esos puntos. ¿Era magia? ¿Ninjutsu de algún tipo? ¿Reflejos del agua?
— Ren, ¿qué es eso de allí? Hay luces flotantes. — señaló los puntos y se giró a su hermana.
Igual había de eso en Amegakure también, sobre todo si tenía que ver con el lago.
Hasta aquel momento nunca se había percatado de los pequeños farolillos que había en la baranda del puente y que iluminaban durante la noche. Estaban separados entre ellos por una distancia muy razonable por lo que la luz que ofrecían era algo tenue, la justa para poder ver donde pisas con claridad.
Sobre la superficie del lago, donde ya no llegaba la luz de los farolillos, se acumulaban pequeños puntos brillantes. Desde la distancia apenas podía distinguirse su forma, solo eran puntos. Hana entrecerró los ojos, intentando descubrir de donde salían esos puntos. ¿Era magia? ¿Ninjutsu de algún tipo? ¿Reflejos del agua?
— Ren, ¿qué es eso de allí? Hay luces flotantes. — señaló los puntos y se giró a su hermana.
Igual había de eso en Amegakure también, sobre todo si tenía que ver con el lago.