19/06/2020, 17:35
— Un poco de té estará bien para terminar de calmarme —
Hana asintió y salió por la puerta por la que había entrado, porque obviamente no tenía cocina privada, había una común para todos los residentes de Nantonoya. Tardaría unos minutos, en los que Ren estaría a solas en la habitación, sin nadie que la supervisase. En completo silencio sin más ruido que el que ella misma generase.
Minutos más tarde oiría pasos fuera y Hana abriría la puerta con cuidado, pues con la otra manos sujetaba una bandeja con una tetera y todo lo necesario para tomar el té, incluido algo de chocolate y unas pastas. Lo dejó sobre una mesa baja que había en medio de la habitación, con cojines rodeandola.
— Espero que te guste, creo que es la segunda vez que hago té. Kami-sama, seguramente sepa a rayos. — dijo mientras servía en el par de tazas que había traido.
Hana asintió y salió por la puerta por la que había entrado, porque obviamente no tenía cocina privada, había una común para todos los residentes de Nantonoya. Tardaría unos minutos, en los que Ren estaría a solas en la habitación, sin nadie que la supervisase. En completo silencio sin más ruido que el que ella misma generase.
Minutos más tarde oiría pasos fuera y Hana abriría la puerta con cuidado, pues con la otra manos sujetaba una bandeja con una tetera y todo lo necesario para tomar el té, incluido algo de chocolate y unas pastas. Lo dejó sobre una mesa baja que había en medio de la habitación, con cojines rodeandola.
— Espero que te guste, creo que es la segunda vez que hago té. Kami-sama, seguramente sepa a rayos. — dijo mientras servía en el par de tazas que había traido.