13/08/2020, 16:37
Kaido esbozó una sonrisa dentada. Sus ojos, azules, eran el vivo reflejo de un mar en calma de aguas claras y cristalinas. Aguas claras y cristalinas que dejaba entrever el grupo de tiburones que nadaba en círculos bajo la superficie.
—El fuego de un Dragón no es nada para el agua que abraza a un Tiburón.
Kaido se llevó una píldora de soldado a la boca antes de replicar.
—Cuando mi fuego abrase a Ayame, como iba a hacerlo aquel día en Coladragón de no haberte interpuesto, lo veremos. Cuando mi fuego abrase a Daruu, lo veremos. Cuando mi fuego arrase a Yui y a sus patéticos ninjas... lo veremos.
Mientras hablaba, Kaido caminaba lateralmente, manteniendo una distancia de cinco metros con su otro yo. Llegó un momento en que se posicionó sobre la uchigatana que le había caído minutos atrás.
—Voy a hacerme pasar por ti, Kaido. Cuando te mate, narraré a Daruu cómo conseguiste matarme. Le contaré cuánto me alegro volver junto a él. Y cuando esté en el corazón de Ame… —su sonrisa se ensanchó, pero no añadió nada más.
En su lugar, se agachó para recoger la uchigatana, que emitió un sonido metálico al rasgar el suelo de hormigón. Eso, y un brillo que cegó a su contrario haciendo uso de una técnica de sobras conocidas por ambos. Kaido envainó la uchigatana y lo que sucedió después...
Bueno, lo que sucedió después fue el jaque de aquel combate. ¿Hacia qué bando? Pronto se descubriría...
—El fuego de un Dragón no es nada para el agua que abraza a un Tiburón.
Kaido se llevó una píldora de soldado a la boca antes de replicar.
—Cuando mi fuego abrase a Ayame, como iba a hacerlo aquel día en Coladragón de no haberte interpuesto, lo veremos. Cuando mi fuego abrase a Daruu, lo veremos. Cuando mi fuego arrase a Yui y a sus patéticos ninjas... lo veremos.
Mientras hablaba, Kaido caminaba lateralmente, manteniendo una distancia de cinco metros con su otro yo. Llegó un momento en que se posicionó sobre la uchigatana que le había caído minutos atrás.
—Voy a hacerme pasar por ti, Kaido. Cuando te mate, narraré a Daruu cómo conseguiste matarme. Le contaré cuánto me alegro volver junto a él. Y cuando esté en el corazón de Ame… —su sonrisa se ensanchó, pero no añadió nada más.
En su lugar, se agachó para recoger la uchigatana, que emitió un sonido metálico al rasgar el suelo de hormigón. Eso, y un brillo que cegó a su contrario haciendo uso de una técnica de sobras conocidas por ambos. Kaido envainó la uchigatana y lo que sucedió después...
Bueno, lo que sucedió después fue el jaque de aquel combate. ¿Hacia qué bando? Pronto se descubriría...
![[Imagen: MsR3sea.png]](https://i.imgur.com/MsR3sea.png)
Esta cuenta representa a la totalidad de los administradores de NinjaWorld.es