31/08/2020, 11:07
—N... no, lo siento. No está disponible, y lleva ya u-una hora sin poder atender a nadie —Pero... pero... di nosotros habíamos llegado a primera hora, los primero, para pillarlo libre si o si ¿Como era posible?—. E-está re-reunido con... con... con... —¿con quién?¿Quien había llegado antes que nosotros?¿Katsudon?¿Le estaba contando todo a Katsudon?— ¡Ah!
¡ZAPONK!
Menudo golpe se acababa de dar en la frente la muchacha de la recepción contra el escritorio al hacer una reverencia a... Me giré a comprobarlo.
—Datsue-kun, ¡cuánto tiempo! —Alguien desconocido para mí, al menos hasta que la recepcionista habló otra voz, susurrando.
Básicamente, Datsue los había descrito justo el día anterior, aunque no físicamente, claro. No al menos a todos ellos, de una, había mencionado que era la hermana de Shiona, y joder si lo era, era clavadita a ella. Hice una reverencia en dirección a los tres, aunque sin golpearme con nada.
—Ya os dejamos a Hanabi-kun tranquilo, no os preocupéis —Dijo el unico hombre y el que parecía más mayor de todos. Debia ser Uzumaki Ryoukajiin, segun lo que había descrito Datsue —. Lo siento por lo que tuvisteis que vivir en el Torneo, chicos.
Por su forma de hablar parecía buena gente. Es decir, se estaba disculpando por algo por lo que no tenia la culpa, Nadia habría podido predecir lo que iba a suceder, y mucho menos que iban a causar ese caos. Quizás, si podría haberse esperado un ataque de Kurama, al fin y al cabo se juntaban los Jinchurikis en un mismo sitio, pero no de una panda de criminales.
—Algún día pagarán por lo que han hecho —Si que pagarían. Datsue estaba decidido a darles caza, y yo pensaba seguirle.—. Pero ahora tenemos que mirar por nuestro país.
—Eso me temo. Pero mejor que dejemos que Hanabi se termine por decidir, Sanona. Si vais a contarle malas noticias, será mejor que seáis suaves con él. Dadle algo de charla antes de nada. Las cosas no están... del todo bien, y ha pasado por mucho últimamente. Lo encontraréis en la sala de reuniones del primer piso.
Bueno. Malas noticias no eran. Al fin y al cabo, el descubrimiento de la guarida del enemigo era una buena noticia, quizás incluso los miembros del consejo hubieran querido escucharlo, pero antes de que pudiera abrir la boca, ya se habían marchado.
Quizás había perdido una oportunidad de oro para hacer la propuesta que había comentado con Datsue, pero no parecía el mejor momento para algo así. No por las caras que tenían y sus palabras. No entendí lo último que alcanzamos a escuchar, pero no parecía una buena señal.
—Bueno, creo que ya es nuestro turno ¿Verdad? No te preocupes, creo que lo que traemos no son malas noticias. —Le pregunté a la chica de la recepción, aunque sin olvidarme, claro, del golpe. —A todo esto... ¿Estas bien? Menudo golpe...
Yo no era médico, pero desde los acontecimientos del torneo, de golpes en la cabeza, algo sabía.
¡ZAPONK!
Menudo golpe se acababa de dar en la frente la muchacha de la recepción contra el escritorio al hacer una reverencia a... Me giré a comprobarlo.
—Datsue-kun, ¡cuánto tiempo! —Alguien desconocido para mí, al menos hasta que la recepcionista habló otra voz, susurrando.
Básicamente, Datsue los había descrito justo el día anterior, aunque no físicamente, claro. No al menos a todos ellos, de una, había mencionado que era la hermana de Shiona, y joder si lo era, era clavadita a ella. Hice una reverencia en dirección a los tres, aunque sin golpearme con nada.
—Ya os dejamos a Hanabi-kun tranquilo, no os preocupéis —Dijo el unico hombre y el que parecía más mayor de todos. Debia ser Uzumaki Ryoukajiin, segun lo que había descrito Datsue —. Lo siento por lo que tuvisteis que vivir en el Torneo, chicos.
Por su forma de hablar parecía buena gente. Es decir, se estaba disculpando por algo por lo que no tenia la culpa, Nadia habría podido predecir lo que iba a suceder, y mucho menos que iban a causar ese caos. Quizás, si podría haberse esperado un ataque de Kurama, al fin y al cabo se juntaban los Jinchurikis en un mismo sitio, pero no de una panda de criminales.
—Algún día pagarán por lo que han hecho —Si que pagarían. Datsue estaba decidido a darles caza, y yo pensaba seguirle.—. Pero ahora tenemos que mirar por nuestro país.
—Eso me temo. Pero mejor que dejemos que Hanabi se termine por decidir, Sanona. Si vais a contarle malas noticias, será mejor que seáis suaves con él. Dadle algo de charla antes de nada. Las cosas no están... del todo bien, y ha pasado por mucho últimamente. Lo encontraréis en la sala de reuniones del primer piso.
Bueno. Malas noticias no eran. Al fin y al cabo, el descubrimiento de la guarida del enemigo era una buena noticia, quizás incluso los miembros del consejo hubieran querido escucharlo, pero antes de que pudiera abrir la boca, ya se habían marchado.
Quizás había perdido una oportunidad de oro para hacer la propuesta que había comentado con Datsue, pero no parecía el mejor momento para algo así. No por las caras que tenían y sus palabras. No entendí lo último que alcanzamos a escuchar, pero no parecía una buena señal.
—Bueno, creo que ya es nuestro turno ¿Verdad? No te preocupes, creo que lo que traemos no son malas noticias. —Le pregunté a la chica de la recepción, aunque sin olvidarme, claro, del golpe. —A todo esto... ¿Estas bien? Menudo golpe...
Yo no era médico, pero desde los acontecimientos del torneo, de golpes en la cabeza, algo sabía.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)