4/01/2022, 17:27
El ruido de la lluvia se volvía cada vez más intenso en su cabeza. Con cada segundo su ira crecía y sus oídos se volvían más sensibles al ruido. Con cada segundo se le nublaba más el juicio y le temblaba más el pulso. Las imágenes que la perseguían cada noche hicieron acto de presencia. Su hermana bajo los escombros, su sangre en sus manos, el dolor y la ira.
Todo eso se desvaneció al sentir la mano de su hermana agarrar la suya. Se giró de golpe, como si acabase de volver a la realidad después de un viaje poco entrañable. Se quitó las lágrimas con el brazo, tan o más húmedo que sus propias mejillas, pero infinitamente más frío.
— ¿Me acompañas, Ka-chan?
La voz de Kimi sonaba normal, aunque su rostro reflejaba algo diferente. Chika no era capaz de eso. Su expresión era una de contención, estaba intentando mantener todo a raya y no lo estaba consiguiendo.
— S-sí, cla... — un ataque de hipo la interrumpió y después no intentó acabar la frase, solo miró al suelo y dejó que su hermana la guiase.
Todo eso se desvaneció al sentir la mano de su hermana agarrar la suya. Se giró de golpe, como si acabase de volver a la realidad después de un viaje poco entrañable. Se quitó las lágrimas con el brazo, tan o más húmedo que sus propias mejillas, pero infinitamente más frío.
— ¿Me acompañas, Ka-chan?
La voz de Kimi sonaba normal, aunque su rostro reflejaba algo diferente. Chika no era capaz de eso. Su expresión era una de contención, estaba intentando mantener todo a raya y no lo estaba consiguiendo.
— S-sí, cla... — un ataque de hipo la interrumpió y después no intentó acabar la frase, solo miró al suelo y dejó que su hermana la guiase.