18/04/2022, 11:00
— H-Hana yo... V-Vayamos a ese sitio... Tengo... Tengo algo que contarte...
El nerviosismo de Ren tomó otro matiz al acompañarlo de unas palabras que generaban tanta tensión. ¿Algo que contarle? Tenía que ser algo sobre su relación. Tal vez ya no quería ser su hermana, finalmente lo había pensado y era raro ir por ahí diciendo que era hermana de una kunoichi de Uzushiogakure rubia y huerfana.
— Claro. — Hana asintió levemente haciendo gala de más calma de la que tenia.
Por suerte, Ren la agarró con fuerza y la guió, porque Hana dudaba de haber sido capaz de guiarse con sus pensamientos yendo completamente locos. ¿Qué podía ser? Si era lo de dejar de ser hermanas, no tendría tantos problemas en decirselo, ¿no? Tenía que ser algo más importante. ¿Pero el qué? No se le ocurría nada más que cosas malas. ¿Iba a desaparecer ella ahora? O peor, ¿iba a participar en la guerra? Había evitado el tema por si Ren no lo sabía, lo cual era tremendamente estupido, pero Hana era de agarrarse a creencias estupidas por su bien mental.
Llegaron al lugar y Ren se hizo cargo de todo mientras Hana se quedaba muy quieta y sin perderla de vista. Estaba intentando parecer tan calmada como fuese posible pero empezó a juguetear con sus mechones de pelo en cuanto Ren la soltó. Después a dar pequeños golpecitos con los pies en el suelo. Por suerte, Ren no tardó demasiado en volver y llevarla a una habitación.
Ni siquiera miró el lugar con atención. En cuanto cerró la puerta, se quedó allí mismo, mirando a Ren.
— ¿Y bien?
El nerviosismo de Ren tomó otro matiz al acompañarlo de unas palabras que generaban tanta tensión. ¿Algo que contarle? Tenía que ser algo sobre su relación. Tal vez ya no quería ser su hermana, finalmente lo había pensado y era raro ir por ahí diciendo que era hermana de una kunoichi de Uzushiogakure rubia y huerfana.
— Claro. — Hana asintió levemente haciendo gala de más calma de la que tenia.
Por suerte, Ren la agarró con fuerza y la guió, porque Hana dudaba de haber sido capaz de guiarse con sus pensamientos yendo completamente locos. ¿Qué podía ser? Si era lo de dejar de ser hermanas, no tendría tantos problemas en decirselo, ¿no? Tenía que ser algo más importante. ¿Pero el qué? No se le ocurría nada más que cosas malas. ¿Iba a desaparecer ella ahora? O peor, ¿iba a participar en la guerra? Había evitado el tema por si Ren no lo sabía, lo cual era tremendamente estupido, pero Hana era de agarrarse a creencias estupidas por su bien mental.
Llegaron al lugar y Ren se hizo cargo de todo mientras Hana se quedaba muy quieta y sin perderla de vista. Estaba intentando parecer tan calmada como fuese posible pero empezó a juguetear con sus mechones de pelo en cuanto Ren la soltó. Después a dar pequeños golpecitos con los pies en el suelo. Por suerte, Ren no tardó demasiado en volver y llevarla a una habitación.
Ni siquiera miró el lugar con atención. En cuanto cerró la puerta, se quedó allí mismo, mirando a Ren.
— ¿Y bien?