26/04/2022, 21:33
Fuera la que fuera la opción que tomara Hana, su relación iba a cambiar por completo y jamás volvería a ser como antes. La rubia tartamudeó, poco a poco enmudeció.
— ¡Te quiero Himura Hana! ¡Te quiero más que a mi propia vida, eso es lo que pasa! — Gritó esta vez mirándola directamente.
Tenía un leve rubor en sus mejillas que contrastaba con la oscuridad de sus cabellos negros, su pálida piel y sus ojos azules perlados por las lágrimas con grandes pestañas. Se aferró aún más a su camisa, y movía los labios de forma nerviosa.
— ¡Te quiero Himura Hana! ¡Te quiero más que a mi propia vida, eso es lo que pasa! — Gritó esta vez mirándola directamente.
Tenía un leve rubor en sus mejillas que contrastaba con la oscuridad de sus cabellos negros, su pálida piel y sus ojos azules perlados por las lágrimas con grandes pestañas. Se aferró aún más a su camisa, y movía los labios de forma nerviosa.