10/05/2022, 18:27
Umi se llevó, inconscientemente, ambas manos al collar con pinchos que adornaba su cuello.
—No. —La respuesta fue directa y seca. Normalmente se habría quedado ahí, pero al ver la cara de la muchacha, se sintió presionada a decir algo más—. Escucha, no sé dónde me lo compró, pero fue un regalo de mi padre. Una semana antes de morir.
»No es algo que vaya a prestarle a nadie. Lo siento.
—No. —La respuesta fue directa y seca. Normalmente se habría quedado ahí, pero al ver la cara de la muchacha, se sintió presionada a decir algo más—. Escucha, no sé dónde me lo compró, pero fue un regalo de mi padre. Una semana antes de morir.
»No es algo que vaya a prestarle a nadie. Lo siento.