25/05/2022, 21:18
Moguko no tenía motivo alguno para desconfiar de las palabras de la muchacha que acababa de conocer. Simplemente aceptaría con un leve gesto de su cabeza asintiendo.
—Sin duda alguna es curioso, quizás debería prestar más atención al moverme por la aldea...
Terminó reflexionando la médica.
La propuesta de la muchacha, de entrenar un día y de paso enseñarle su espada no sería algo que le cayera mal, sino todo lo contrario aparentemente. Lo cuál ciertamente le resultaba agradable, nunca estaba de más expandir su circulo de aliados y gente que tambien fuese un otaku de las armas.
—¡Bien!
Exclamaría con cierto entusiasmo.
—¿Qué día te resultaría cómodo que nos reunamos?
Consultaría queriendo desarrollar la idea un poco más.
—Sin duda alguna es curioso, quizás debería prestar más atención al moverme por la aldea...
Terminó reflexionando la médica.
La propuesta de la muchacha, de entrenar un día y de paso enseñarle su espada no sería algo que le cayera mal, sino todo lo contrario aparentemente. Lo cuál ciertamente le resultaba agradable, nunca estaba de más expandir su circulo de aliados y gente que tambien fuese un otaku de las armas.
—¡Bien!
Exclamaría con cierto entusiasmo.
—¿Qué día te resultaría cómodo que nos reunamos?
Consultaría queriendo desarrollar la idea un poco más.