5/10/2022, 17:47
Hana rió de nuevo ante la proposición de Ren. Aquello era completamente imposible. No solo porque el territorio era de Kurama sino porque no puedes tener una granja de pingüinos. O tal vez nadie había sido lo suficiente valiente para hacer una granja en pleno glaciar. De todas formas, el espiritu de aventura de Hana no era tanto, en cambio su espiritu de asentarse tranquilamente crecía por días.
— No puedes hacer una granja de pingüinos, pero podrías venirte tú al País del Fuego y hacer una granja normal. Yo me encargo de los animalitos y tú puedes plantar ajos, cebollas, patatas y todo lo que sea plantable.
Esa era la parte que no le convencía de la granja, las plantas, pero los animales los cogería sin miedo. Podría criar conejos y pollitos y tener algunas vacas para sacar leche, sería genial.
— No puedes hacer una granja de pingüinos, pero podrías venirte tú al País del Fuego y hacer una granja normal. Yo me encargo de los animalitos y tú puedes plantar ajos, cebollas, patatas y todo lo que sea plantable.
Esa era la parte que no le convencía de la granja, las plantas, pero los animales los cogería sin miedo. Podría criar conejos y pollitos y tener algunas vacas para sacar leche, sería genial.