9/10/2022, 18:08
Viendo que la kunoichi venía visiblemente enfadada, el hombre golpeó la puerta de inmediato. Por suerte, Ren se paró antes de que le diese un paro cardiaco al pobre guarda, que volvió a sonreir, esta vez con una sonrisa temblorosa.
— Está dentro, si no quieres que le pase nada, será mejor que entres desarmada. ¡No nos tomes por tontos!
Parecía haber hecho acopio de todo el valor de su vida para decir aquellas palabras.
— Está dentro, si no quieres que le pase nada, será mejor que entres desarmada. ¡No nos tomes por tontos!
Parecía haber hecho acopio de todo el valor de su vida para decir aquellas palabras.