20/11/2022, 03:06
Al notar la sorpresa de su compañera, Kimi no pudo evitar reírse un poco. Realmente, aquella era una reacción que recibía más que a menudo, pues aparentemente la gente solía tener una imagen demasiado buena de ella.
— Oh. A mi padre también le interesa mucho la esgrima, así que nos ha enseñado un poco. —Mencionó Kimi—. Si lo desea, podría venir a entrenar a nuestro dojo. —La invitó, con una sonrisa amable.
Mientras hablaban, las chicas pronto se darían cuenta de que ya habían llegado al distrito industrial, donde tendrían que encontrar la nave indicada.
— ¿Ve una con un 02 escrito, Yamanouchi-san?
— Oh. A mi padre también le interesa mucho la esgrima, así que nos ha enseñado un poco. —Mencionó Kimi—. Si lo desea, podría venir a entrenar a nuestro dojo. —La invitó, con una sonrisa amable.
Mientras hablaban, las chicas pronto se darían cuenta de que ya habían llegado al distrito industrial, donde tendrían que encontrar la nave indicada.
— ¿Ve una con un 02 escrito, Yamanouchi-san?