23/01/2025, 23:49
La sonrisa de la pelirroja se deshizo levemnente, manteniendo una debil sonrisa.
— Si necesitas afilar algo, ves adentro a hablar con la secretaria. Si quieres una cita para aprender también ves adentro y si necesitas las herramientas necesarias... ves adentro. — dijo señalando la puerta del local. — Todas las chicas guapas están cogidas. No se puede vivir así. — protestó volviendo a su asiento.
— Si necesitas afilar algo, ves adentro a hablar con la secretaria. Si quieres una cita para aprender también ves adentro y si necesitas las herramientas necesarias... ves adentro. — dijo señalando la puerta del local. — Todas las chicas guapas están cogidas. No se puede vivir así. — protestó volviendo a su asiento.