2/02/2025, 22:07
Hana respondió de forma automatica devolviendole el abrazo y adentrandose entre los pechos de Ren sin dudar. Se acomodó y soltó un bufido, sin siquiera despertarse. Estarían así apenas una hora antes de que algo mucho peor que el Sol las interrumpiera.
— Mamá, mamá, mamá, mamá. — se escuchó una voz mientras le iba dando con el dedo en la mejilla a Ren, que era la que más asomaba por encima de las sabanas. — Ya está el desayuno, se os va a enfriar. Mamá, mamá, mamá.
Seguramente Saori era la que le había dicho que no saltase sobre la cama, ya que era una cama vieja y podría romperse, pero si no le hacían caso, Lily era perfectamente capaz de saltar desde encima del escritorio.
— Mamá, mamá, mamá, mamá. — se escuchó una voz mientras le iba dando con el dedo en la mejilla a Ren, que era la que más asomaba por encima de las sabanas. — Ya está el desayuno, se os va a enfriar. Mamá, mamá, mamá.
Seguramente Saori era la que le había dicho que no saltase sobre la cama, ya que era una cama vieja y podría romperse, pero si no le hacían caso, Lily era perfectamente capaz de saltar desde encima del escritorio.