Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
31/05/2020, 23:21 (Última modificación: 9/06/2020, 20:28 por Aotsuki Ayame. Editado 1 vez en total.)
El Valle de los Dojos estaba abarrotado. El Torneo de los Dojos era una cosa, pero las finales del Torneo de los Dojos eran distintas. Era el lugar donde de verdad se ofrecían los mayores espectáculos, y todo el mundo quería asistir a ellos. La guardia en el Valle también había sido reforzada al máximo: no en vano ningún Señor Feudal quería perderse estos acontecimientos.
Los participantes, incluso los que no habían conseguido llegar a la final, sabían que este era precisamente el mejor momento para reclamar la atención de los poderosos y los adinerados. Los que más tarde traerían dinero a sus villas.
Por eso, quizás algunos de ellos, en sus camerinos, estarían especialmente nerviosos. O tal vez sólo les importase la gloria. Quedar lo más alto posible, por sí mismos. Otros quizás se mantenían en calma, entendiendo que aquello no era más que una misión cualquiera. Aunque en el fondo supieran que eso era contarse una mentira a sí mismo.
Una vez tras otra, las dos puertas inferiores, frente a frente, se abrieron. Y una vez tras otra, de una de ellas salió un ganador... y de la contraria un perdedor.
Recordemos el ring de combate: una plataforma circular, de madera, de treinta metros de diámetro. Lo suficientemente espaciosa como para que los participantes luchasen a gusto sin herir al público, que estaba separado del ring por siete metros de césped y una baranda metálica.
Después de la revisión de varios combates del torneo, debo recordaros por favor la necesidad de ceñiros a realizar una acción o conjunto de acciones corto. En los siguientes turnos, lo recomendable es reaccionar a la acción del oponente, y responder con otra acción. Algunos sois ninjas de nivel muy alto, pero mantengamos el DINAMISMO del combate intacto y no seamos superhéroes.
De momento, el límite de actividad es de 72 horas desde la respuesta del contrincante. Pero ambos deberán contestar al tema en las primeras 72 horas, o se considerará que no se han presentado en el estadio a tiempo.
A partir del lunes 15 de junio, el límite de actividad pasa a ser de 48 horas. A partir del lunes 22 de junio, el límite de actividad pasa a ser de 24 horas.
Un usuario que se salte el límite una vez, perderá su turno y el oponente tendrá derecho a acertarle con lo que desee, manipulándolo incluso. Si el límite se ha superado, el usuario ya ha perdido su turno. Eso quiere decir que YA NO PUEDE CONTESTAR. No se admiten quejas. No se admiten pactos entre los combatientes. No se puede esperar al oponente. Si uno de los dos no ha llegado a tiempo, es obligatorio saltarle el turno. Si ambos contrincantes se saltan el límite de turnos, el combate acabará en un empate manipulado por la administración. Nuevamente, aunque la administración tarde tres días más en pasarse, si ya se ha superado el límite, los usuarios no pueden contestar.
Si un usuario se salta el límite dos veces, perderá su turno y el oponente tendrá que rolear cómo lo deja inconsciente en el siguiente turno. Nuevamente, no están permitidos los acuerdos entre usuarios, esto debe hacerse sí o sí. Si un usuario se salta el límite dos veces y el otro se lo salta una vez justo después, la administración será la que rolee como ambos personajes caen K.O. al mismo tiempo. No habrá lugar para quejas y una vez superados los límites los usuarios no podrán contestar.
Como en otros combates, pero con mucha más importancia aquí, recordad seguir las reglas pertinentes a las Acciones ocultas. Y recordad, tirar un kunai al suelo atado con un hilo a una bomba, no son 3 AO (tirar un kunai al suelo, atarlo con un hilo, sacar una bomba del portaobjetos y atarla a dicho hilo). Es 1 AO (tirar un kunai al suelo atado con un hilo a una bomba). No abruméis con las AO, utilizadlas de manera justa y necesaria.
Resolved los conflictos por MP y con cordialidad. Si no se llega a un acuerdo, publicad un tema en Conflictos. No hay premios materiales en el torneo, y si perdéis vais a seguir combatiendo hasta el final. No os peleéis. Las decisiones del master que resuelva el conflicto serán inapelables.
Esta cuenta representa a la totalidad de los administradores de NinjaWorld.es
¿Estaba nervioso? Quizás un poco. Pero a esas alturas, ya estaba seguro de que nadie se reiría de mi, ni de mi villa ni del uzukage. No al menos por mi culpa. Y esperaba que mis compañeros también dieran lo mejor en los combates que les quedaban.
Yo pensaba hacer lo mismo. Iba a salir ahí, e iba a darlo todo. No por la gloria, un poco por la fama sí, aunque la que buscaba era la fama de la forja. Pero sobretodo, salía a darlo todo por mí mismo. Para demostrarme que cada día estaba mas preparado para ir al hierro y salvar a los samuráis.
Me había plantado delante de criaturas que, en su forma original debían ser del tamaño de un edificio, que odiaban a los humanos por las atrocidades que habían cometido contra ellos, y les había dicho que peleasen junto a esos mismos humanos contra su propio hermano. Fuera lo fuerte que fuera mi rival, ni de coña daba tanto miedo como eso.
Además. Finalmente lo había hecho. Había forjado una nueva bandana para Kazuma. Una como la que había roto en el primer combate. Lo había hecho con buenas intenciones, y si los kusajin querían tomárselo como un insulto u ofensa, allá ellos.
Salí a la arena cuando el guardia así lo indicó. El Rasengan de Hana había destrozado mi Ugawi, pero había conseguido hacerme con otro igual: De color rojo y sin mangas, dejando a la vista el tatuaje de mi familia, y la bandana de Uzushiogakure. Así que estaba vestido igual que en mis anteriores combates.
Esta vez, ademas, sujeta en mi mano derecha, llevaba la bandana para darsela a mi rival antes de empezar el combate. Ella podría entregarsela a Kazuma, a su familia o quien pudiese.
Como en los anteriores, fui el primero en pisar el estadio, y como siempre, salude con una reverencia al publico y a los Kages después de situarme en la posición que me había indicado el guardia.
Sintió una explosión de adrenalina al escuchar a la audiencia desde dentro de los vestidores. Respiró profundamente.
"Por Kazuma-san."
Se puso de pie, llena a dos tercios de convicción y el resto de nervios y pena. Comenzó a andar a paso firme.
"Por mi familia."
La luz del exterior la bañó y el aire del verano infló sus pulmones. Cerró los ojos momentáneamente antes de subir a la plataforma.
"Por Kusagakure."
Su oponente ya estaba allí. El espadachín Uzujin. Ranko, decidida, no bajó la mirada ni cuando le dedicó una reverencia al chico. Se inclinó también ante aquellas personas importantes en las gradas, y se volvió hacia su contrincante. La Kusajin estaba ataviada con su traje blanco, tal como los combates anteriores. Tenía que lucirse en la final con su uniforme, y dejar en alto las ropas de su hermana.
—Sasaki Reiji-san —comenzó con voz suficientemente audible. Se acercaría un poco más para un pequeño intercambio de palabras previo al combate —. Q-quiero que sepa que n-no le guardo rencor a-alguno. P-por lo sucedido co-con Kazuma-san, me refiero. E-e-estoy segura que luchó cual guerrero. Y así hemos de hacer hoy n-nosotros. También.
No se pondría en guardia siquiera, no sin antes dejar en claro sus palabras y escuchar lo que Reiji tuviera que decirle. Ya llegaría el momento de intercambiar sellos de confrontación, golpes, mandobles y jutsus. Ya llegaría la batalla.
Mi oponente no tardo en aparecer desde el otro lado. El publico estaba expectante, claro, era una gran final. Pero estaba seguro que ansiaban más aún ver el combate de Daruu y Datsue. Pero no pensaba dejar que se quedasen con la gloria tan fácilmente. Aquel día, incluso mi padre, que había cerrado la forja durante una semana, algo inaudito, estaba allí para animarme. No podía defraudarlos.
La muchacha saludó con una reverencia a la que correspondi educadamente. Mi madre ya me había regañado lo suficiente por mi forma de actuar en la ronda anterior. Después, ella saludo al público y a los Kages y tras eso, me dedicó unas palabras.
—Sasaki Reiji-san —Se acercó un poco, pero no parecía que quisiera iniciar el combate. —. Q-quiero que sepa que n-no le guardo rencor a-alguno. P-por lo sucedido co-con Kazuma-san, me refiero. E-e-estoy segura que luchó cual guerrero. Y así hemos de hacer hoy n-nosotros. También.
Agradecía el gesto. Aunque no me hubiera importado si los Kusajines me odiaban. Yo sabía lo que había sucedido en ese combate, y sabia que no había sido a propósito. Su odió no podría manchar mi consciencia. Por suerte, esta chica parecía no odiarme.
—Sagiso Ranko-san ¿Verdad?Agradezco tu gesto. —Arrojé suavemente la bandana que sujetaba con el brazo derecho a la altura del pecho. De forma que no pareciese un ataque. —Es la bandana que rompí, la he vuelto a forjar. Espero que puedas entregársela a Kazuma o su familia, y si es posible, agradecería que te disculpases con ellos de mi parte, no pretendía que el combate terminase de esa forma.
Ya estaba hecho. Ahora, si querían ofenderse o sentirse insultados, me daba igual. Solo quedaba esperar a la reacción de mi oponente.
Su contrincante demostró espíritu deportivo y agradeció sus palabras. Acto seguido, arrojó algo. Ranko se había descuidado, pero el objeto no parecía ser un arma. Se movió rápidamente para tomarlo en el aire.
”La bandana de un Kusajin reforjada por un Uzujin. Quiero tomar esto como un buen augurio.” Sonriente, la miró por un segundo. Se imaginó atándosela a la frente, podría decir algo como “Kazuma-san peleará junto a mí hoy”. Pero sintió que no era apropiado. Era una ofrenda de paz por parte de Reiji, no tenía derecho de usarla en combate.
—Co-con todo gusto se la entregaré, Reiji-san. —dijo con otra reverencia, refiriéndose tanto a la pieza como a las disculpas, mientras alzaba levemente la hitai-ate con ambas manos. Doblaría la tela con cuidado y la metería dentro de su portaobjetos de manera que quedase hasta el fondo.
Una vez acabada la charla, Ranko retrocedería con largos pasos hacia atrás, con una renovada expresión de emoción y alegría en su rostro. Estaba contenta de desmentir lo que Etsu había dicho. Los de Uzushiogakure no estaban como una cabra, o al menos no la mayoría. Ranko se había encontrado con gente de espíritu combativo, amoroso y, ahora, honorable. Se colocaría en el punto donde debería comenzar el combate, dejando aproximadamente unos quince metros entre ambos.
Respiró profundamente y, totalmente erguida, hizo el Sello de la Confrontación con la diestra.
—¡K-Kusagakure no Hakuto se honra de luchar contra Sasaki Reiji-san!
Inconscientemente, ya consideraba aquella declaración parte del combate. La pena de llamarse a sí misma por aquel mote se había esfumado, al menos por lo que durara el evento. Ya luego enrojecería de la vergüenza. Ya luego ocultaría su rostro. Ya luego recordaría a su familia animándole desde las gradas, o a Kintsugi mirando el combate. Su enfoque estaba totalmente puesto sobre el espadachín.
Esperaría a que el Uzujin imitase el Sello, luego adoptaría la postura del Hakuto no Mai. Y el combate iniciaría.
”Es un espadachín. Mi habilidad con Higanbana no es mucha. ¿Puedo desarmarlo? ¿Puedo romper su defensa lo suficiente para asestarle una patada? Por más fuerte que sean mis piernas, no creo poder detener un sablazo. ¡Ay! En momentos como éste me pregunto si el camino del Taijutsu fue el indicado… Siempre estoy un paso atrás de todos en cuanto a mi rango de habilidades… El Raiton, el Genjutsu, el Raiton de nuevo… Necesito tiempo para verlo en acción.”
Comenzó a dar firmes pasos, sin prisa, hacia su oponente, mientras hacía sellos.
—Doton: Iwa Bunshin no Jutsu.
Luego escupiría al suelo dos bolas marrones que pronto se expanderían en dos Rankos, una a cada lado. La segunda, la de la derecha, estaría cargada de Chakra, por si acaso. Los Ranklones mirarían a la original y las tres asentirían al mismo tiempo.
Las copias comenzarían a correr en dirección a Reiji mientras desenvainaban sendas wakizashis. La de la izquierda se adelantaría un poco más, buscando ser la primera en asestar un golpe con su espada de piedra. La de la derecha, un tanto retrasada a propósito, no lo alcanzaría todavía. La Ranko original habría quedado varios metros por detrás, acercándose cautelosamente al Uzujin.
Shuriken x 3 [Corte superficial 8PV, Corte/impacto 12PV]
Kemuridama [Consumible, 6m de humo por 2 turnos]
Hilo shinobi [Consumible, 10/10m]
C-Ranku no Kibaku Fuda [Consumible, 30PV, 1.5m radio]
¤ Wakizashi (a la espalda, a la altura de la cadera, empuñadura hacia la derecha) [Mango/vaina 12PV, Corte superficial 18PV, Corte 22PV, Penetración 30PV]
A la vista / No visible / Agotado
Daño recibido:∅ [×] Posible daño infligido:9, [Corte superficial de wakizashi rocosa] o 11, [Corte de wakizashi rocosa]
Simplemente asentí agradecido. Por lo menos ella se lo había tomado bien. Lo cual, quería decir, que no había sido del todo una locura. Pero después de aquello tocaba lo que el público quería ver.
Tras eso, la muchacha volvió a la posición inicial del combate, alejada de mi unos quince metros. A pesar de no ser bueno con los sellos, siempre había tenido un algo especial para calcular las distancias.
—¡K-Kusagakure no Hakuto se honra de luchar contra Sasaki Reiji-san!
¿Kusagakure no qué? Bah. Daba igual. Si acaso ya le preguntaría después del combate, o quizás lo averiguaba antes. Pero ahora no importaba, ni era el momento de darle vueltas a la cabeza. Hice el sello de la confrontación y desenvainé a Tsubame. El combate ya había iniciado.
Entonces la muchacha cargó contra mí lentamente. Mientras hacia unos sellos. Yo aguardé, para ver de que se trataba.
—Doton: Iwa Bunshin no Jutsu.
Ah. Clones de tierra. Como el de Hana. Si, buscar la ventaja numérica no era una mala estrategia contra alguien como yo. ¿Pero me iba a detener algo así nada mas empezar? No. Seguramente los samuráis también nos superarían en número.
Los clones, aunque un poco mas alejado del otro, empezaron a correr en mi dirección mientras sacaban sus espadas a bailar. Perfecto, si querían un baile de acero, concedido.
No iba a quedarme quieto esperando a que llegaran hasta mi para defenderme. No. Corrí hacia ellos mientras cargaba el chakra en la hoja de mi espada, preparado para combatir.
Fue, justo antes de que el primero intentase dar su golpe cuando haria un pequeño giro de muñeca, reflejando la luz del sol en el filo de mi hoja, y cegando a las copias, pues la original se había quedado lejos. Pero yo, en ese momento, me conformaba con acabar con los clones.
Aprovecharia la ceguera de ambas para situarme entre las dos y tener a las copias al alcance de mi filo mientras volvía a dejar que fluyera el chakra por el filo. Entonces, liberaría un gran corte en forma de luna a la altura del abdomen.
Con suerte, con aquel movimiento me libraría de los dos clones al mismo tiempo.
- PV:
190/190
–
-0
–
- CK:
137/190
–
-5
–
-48
–
- Posible Daño provocado:
80 PV por Mizakugiri
- Acciones ocultas: -
- Aclaraciones:
- Bonus de Tsubame : +6 PV a daños por corte
-2
–
-2
– (El bonus se pierde tras el uso de cada técnica)
- Bonus de Aichō: +10 PV a daños por corte.
A lo lejos, Ranko reconoció el brillo de la espada, pues aquella técnica también era de su saber.
—¡Espera! ¡Retrocede!
La Ranko de la izquierda estaba demasiado cerca de Reiji como para poder hacer algo, y fue partida en dos por el tajo del Uzujin, cayendo convertida en un montón de piedras. La Ranko de la derecha, aunque había recibido el Nikkō, logró escuchar la indicación de la original, y se había lanzado hacia un lado para alejarse momentáneamente del oponente.
La kunoichi original no se detuvo, y buscó rápidamente un par de shuriken en su portaobjetos para lanzarlos, uno tras de otro. El primero ascendería un poco y haría una curva para intentar impactar a Reiji desde su derecha superior, mientras que el segundo iría en trayectoria directa hacia su pecho.
Al mismo tiempo, el clon soltaría su sable, haría algunos sellos y entreabiría los ojos para ubicar al borroso espadachín mientras avanzaba hacia él hasta estar a unos metros solamente. Daría una patada al suelo y éste estallaría en rocas, picos y escombro, avanzando y destruyendo la plataforma.
—¡Retsudo Tenshō!
PV
230/230
– CK
123/150
–
+5
–
+20
– (Por destrucción del clon) [Regeneración dividida] Ranklon 1:PV
-40/40
–
-80
– Ranklon 2:PV
40/40
– | CK
0/12
–
-12
– • Agilidad: 30
Daño recibido:80 PV [Kumo-ryuu (Ranklon 1)] Posible daño infligido:
C-Ranku no Kibaku Fuda [Consumible, 30PV, 1.5m radio]
¤ Wakizashi (a la espalda, a la altura de la cadera, empuñadura hacia la derecha) [Mango/vaina 12PV, Corte superficial 18PV, Corte 22PV, Penetración 30PV]
Mierda. Mucho chakra gastado para destruir solo uno de los dos clones. Pero con suerte, en algún momento, mi rival sentía el miedo de ser cortada por la mitad igual que su clon. No es algo que yo haría, pero eso mi rival tampoco lo sabía.
Claro que, mi rival no se quedo quieta, y arrojó dos shuriken en mi dirección, pero yo tampoco iba quedarme parado a contemplar como se abalanzaban la copia y la real hacia mi.
Sabía, por instinto, cuanto me separaba de su clon, así que rodé hacia ese lado para evitar los shuriken, mientras el clon corría hacia haciendo los sellos de una técnica que había usado contra mí Hana en el combate anterior. Podía ser otra técnica con los mismos sellos, pero viendo que los clones eran iguales...
Yo corrí hacia el clon y cuando libero la técnica simplemente me desvíe hacia la derecha para evitarlos y continuar acercándome rápidamente a él.
Mi prioridad era eliminar a las copias, por lo que si la alcanzaba, haría como hice con la copia de Hana, cogerla de la ropa, o del pelo, para evitar que huyese y apuñalarla en el abdomen.
Bien podía llevarme algún golpe del clon, pero no me importaba.
- PV:
190/190
–
-0
–
- CK:
147/190
–
+10
–
-0
–
- Posible Daño provocado:
50 PV Penetración.
- Acciones ocultas: -
- Aclaraciones:
- Bonus de Tsubame : +4PV a daños por corte
-2
– (El bonus se pierde tras el golpe)
- Bonus de Aichō: +10 PV a daños por corte.
3/06/2020, 16:08 (Última modificación: 4/06/2020, 00:31 por Sagiso Ranko. Editado 1 vez en total.
Razón: Enfriamiento del Tenbu/Goken Ryu añadido
)
Reiji era, al parecer, tan ágil como Ranko, quien no pudo contener una sonrisa desafiante. El Uzujin se desplazó hacia el clon para evitar los proyectiles a la vez que intentaba reducir el número de enemigos. La kunoichi vio una oportunidad, y ambas actuaron simultáneamente.
Antes de que Ranklon pudiera hacer algo, pues el estar hecha de roca la hacía más lenta, Reiji la tomó de la blusa y dirigió su espada hacia el abdomen del clon. Éste, como último recurso, intentó dar un salto sobre el oponente. Por supuesto, no pudo hacer más que elevarse dos centímetros antes de que el filo de Reiji la atravesara. La copia intentaría entonces cubrirlo en un intento de abrazo, fracciones de segundos antes de que perdiera color y se deshiciera en piedras sobre él, sin hacerle daño, pero dejando una lluvia de roca estorbándole brevemente.
Por otra parte, al ver que Reiji evitaba el Retsudo Tenshō unos segundos antes, Ranko flexionó las piernas y susurró una palabra antes de destrozar el suelo a su alrededor y verse lanzada velozmente en el aire con un salto en dirección al espadachín.
—Hitoshin.
Intentaría aprovechar la ventana que la destrucción de su clon le otorgaba, y lanzaría en el aire una patada izquierda, potenciada tanto por su Hakuto no Tenbu como por el impulso del Hitoshin, dirigida a la nuca de Reiji. Él habría apuñalado a su clon apenas un instante previo, así que él le estaría mostrando su lado derecho a la Ranko original.
Tanto si acertaba el golpe como si no, Ranko se movería, si podía, al otro lado de la posición actual de Reiji, y llevaría su mano a su wakizashi, preparándose para desenvainarla.
PV
230/230
– CK
98/150
–
-20CK
–
+20CK
– (Por destrucción del clon) Enfriamiento del Hakuto no Tenbu/Goken Ryu:
3/3
– Ranklon 2:PV
-10/40
–
-50
–
Daño recibido:50 PV [Estocada (Ranklon 2)] Posible daño infligido:40 PV, [Patada de Hakuto no Mai + Hakuto no Tenbu + Hitoshin]
Shuriken x 3 [Corte superficial 8PV, Corte/impacto 12PV]
Kemuridama [Consumible, 6m de humo por 2 turnos]
Hilo shinobi [Consumible, 10/10m]
C-Ranku no Kibaku Fuda [Consumible, 30PV, 1.5m radio]
¤ Wakizashi (a la espalda, a la altura de la cadera, empuñadura hacia la derecha) [Mango/vaina 12PV, Corte superficial 18PV, Corte 22PV, Penetración 30PV]
Eliminar a la copia no fue exactamente la mejor jugada. Por el rabillo del ojo, a mi derecha, vi como la Kusajin se dirigía hacia mi por el aire a toda velocidad mientras mi espada atravesaba a su copia. Solté la espada inmidetamente. El golpe era inevitable.
Sin embargo, en mi combate con Hana había aprendido una cosa sobre las peleas cuerpo a cuerpo. Si golpeabas demasiado flojo le dabas a tu rival una ventana lo suficientemente grande para devolverte un golpe aún mas fuerte. Por eso, recibiría el golpe estoicamente y despues...
El golpe dolía, no por nada los kusajin eran famosos por su taijutsu, pero no dolía ni siquiera la mitad de lo que dolió el rasengan de Hana. Así que no seria un daño suficiente como para evitar que, antes de que separase la pierna de mi cuerpo, le agarrarse del pantalón para que no huyera, mientras empezaba a cargar una esfera de chakra en mi otra mano. La misma que Hana uso contra mi.
Una esfera que pretendía impactar en el abdomen de mi rival, a la cual solo soltaría una vez la esfera la golpease, para no verme arrastrado por la fuerza que la enviaría unos diez metros mas lejos de donde estábamos.
Aunque esa técnica podría hacer un boquete en el lugar donde te golpeaba, se podía hacer que la esfera girase a menos velocidad para reducir su letalidad. De modo que si Ranko la recibía, solo sentiría como si le hubiesen pegado un fuerte puñetazo en el pecho, aunque quizás, el giro, desgarrarse un poco sus ropas y le dejaría una marca que se iría en un par de días.
Si mi rival salia disparada, entonces seria él momento para recoger la espada que había soltado, pero sin perderle de vista, pues saltaba hacía mi con una velocidad endemoniada.
- PV:
157/190
–
-37
–
- CK:
87/190
–
+0
–
-60
–
- Daño Recibido: 40 PV - Resistencia/10 (3)= 37. (Entiendo que al ser un golpe básico, aunque potenciado con chakra, se aplica la reducción por resistencia. Por favor, avisame si me equivoco, y lo arreglo.)
- Posible Daño provocado:
100 PV Rasengan.
- Acciones ocultas: -
- Aclaraciones:
- Bonus de Tsubame : +4PV a daños por corte
-0
– (El bonus se pierde tras el golpe)
- Bonus de Aichō: +10 PV a daños por corte.
Todo combate era un dar y recibir, y aquella maniobra de Ranko no fue la excepción. Sí, logró asestarle una fuerte patada al Uzujin, pero no pudo evitar que Reiji le asiera del pantalón y le plantara un jutsu en el vientre. Era una técnica que no había visto antes: una esfera de chakra giratoria que rasgó su blusa y la lanzó por los aires. Estiró las piernas para chocar contra el suelo y así ralentizar su retroceso, hasta que rodó un poco, para acabar arrodillada sobre la plataforma. Escupió sangre.
—Ah, Kuu-chan… Lo siento. —susurró al ver cómo su cinto había quedado hecho jirones. Un uniforme más arruinado.
Su bandana estaba acoplada a su obi, y había recibido el impacto directo de la esfera. Ahora el metal estaba doblado, con un patrón en espiral raspado en su superficie. Su cinto se rompió cuando Ranko intentó acomodarlo. La chica se encogió de hombros y arrancó la placa de la tela para meterla bajo el protector de su antebrazo derecho. No estaría a la vista, pero seguiría portando el símbolo de Kusagakure.
"Parece que Kazuma-san no será el único con bandana nueva…" pensó
Todavía podía combatir, a pesar del intenso dolor en su estómago. No sentía estar herida de gravedad, pero su cuerpo sí sentía las consecuencias de tal movimiento por parte del Uzujin. A pesar del intento de su contrincante de reducir la fuerza del ataque, la chica había recibido daño considerable.
—Qué… Qué fascinante jutsu, Reiji-san. Quisiera tener algo así de vistoso. P-pero solo tengo mis piernas. Y mi tierra.
Suspiró mientras se ponía de pie. Su mente maquinó tan rápido como pudo. El chico había recogido su espada de nuevo, aunque Ranko había perdido pista de cuándo la había soltado.
"¿Qué puedo hacer? Obviamente no puedo dejar que me aseste ningún espadazo. ¿Qué tipo de elemento manejará? Espero que no sea Raiton… Si pudiera asestarle algo más que una patada… Aunque…”
—Así que… Bueno, e-esta es la primera vez que uso esto en batalla —Juntó las manos para cuatro sellos y llevó una mano al suelo. La plataforma se agrietó y entre las tablas de madera surgió una jabalina de roca sólida —. Doton. Sento no kōshō.
Apenas tomarla, comenzó a moverse. Acortó la distancia entre ella y Reiji a la mitad y lanzó la jabalina hacia el Uzujin. Acto seguido, aceleró el paso. El dolor le hacía ir más lento, pero no tenía que ser demasiado rápida. Tenía que ser fuerte. Llevaría su mano derecha a su wakizashi para desenvainarla, preparada para asestar un golpe o defenderse de él.
”Espero que funcione.”
Sí, se resta tu Resistencia a mi patada. Y como tenía la bandana en el vientre, creo que reduce el daño del Rasengan. De lo contrario, dime para que corrija mis PV.
PV
137/230
–
-93
– CK
62/150
–
-36
– Enfriamiento de Hakuto no Tenbu/Gōken Ryu:
2/3
– Contusión:
5/5
–
Daño recibido:93PV [Rasengan - Hitai-ate] Posible daño infligido:60 PV, [Jabalina]
¤ Hitai-ate [Protección 7PV)] (bajo el guardabrazo derecho)
¤ Portaobjetos básico[Capacidad 7/10](ajustado sobre su cinto, a su izquierda), dentro el cual:
Shuriken x 3 [Corte superficial 8PV, Corte/impacto 12PV]
Kemuridama [Consumible, 6m de humo por 2 turnos]
Hilo shinobi [Consumible, 10/10m]
C-Ranku no Kibaku Fuda [Consumible, 30PV, 1.5m radio]
¤ Wakizashi (a la espalda, a la altura de la cadera, empuñadura hacia la derecha) [Mango/vaina 12PV, Corte superficial 18PV, Corte 22PV, Penetración 30PV]
Me parece super correcto lo de la bandana. Para eso esta, para proteger
Era la segunda Banda a de Kusagakure que destrozaba en un combate en aquel torneo. A Datsue, e incluso a Daruu, seguro que les encantaba la situación, pero me imaginaba que a Kintsugi le haría cero gracia ver el símbolo de su aldea destrozado una segunda vez por la misma persona.
Claro que... Como diría Datsue, que le dieran a Kintsugi, había amenazado de muerte a Datsue, mi amigo y a los Bijuus, lo que incluía a otro amigo más, y a toda su familia. Y claro, con Ayame había empezado muy mal, pero la cosa había mejorado, de momento una aliada, pero esperaba poder llamarla amiga algún día. Vamos, una lista muy grande de razones por las que si Kitsugi se cabreada y salia amargada de aquel torneo, mejor.
—¡Oye!, Luego te la arreglo si quieres.
Dije a lo lejos, mientras veía como se la guardaba. Como la de Kazuma, yo la había roto, yo la arreglaría. Siempre que me dejasen, claro. Aunque viendo que se había tomado bien la primera...
—Qué… Qué fascinante jutsu, Reiji-san. Quisiera tener algo así de vistoso. P-pero solo tengo mis piernas. Y mi tierra.
—Es el jutsu estrella de mi aldea, tenia que utilizarlo en la final. Y si solo tienes tus piernas y tu tierra, ven con ellas, yo te responderé con mi espada, como un guerrero.
Aunque no era lo único que tenia. Aún no había mostrado mi naturaleza de chakra, lo que me daba cierta ventaja. Sobretodo por que sabia que mi oponente utilizaba, por lo menos, Doton. Quizás supiera usar dos. Yo sabia.
Mientras mi rival se ponía en pié y tras recoger a Tsubame del suelo, me preparé para el posible contrataque de mi rival. Ademas, yo mismo la había incitado a que viniera con todo lo que tenia.
—Así que… Bueno, e-esta es la primera vez que uso esto en batalla
Genial, yo también tenia una técnica nueva bajo la manga, que quizás, no llegase a utilizar nunca, o quizás si. Esa final seria ideal. Pero no me quede quieto a esperar que arrojase su técnica contra mi, yo también me parepararia para contraatacar con un jutsu de mi propia cosecha.
—. Doton. Sento no kōshō.
Había creado una maldita lanza de tierra. En unos segundos. Y parecía tan letal como las que hacia yo. No potdia permitir que eso se llevase la gloria y la atención. El acero de los sasaki era mejor que la roca.
Arma de roca en mano, la muchacha empezó a correr hacia mí y a unos cinco metros, arrojó la lanza en mi dirección. Bien.
Por desgracia para ella, había llegado la hora de que el dragón de trueno destrozase con sus garras la dura roca. A través de mi espada. A través del acero de los Sasaki.
Respondí a la jabalina de Doton con una cuchillada eléctrica que viajara en diagonal para alcanzar la jabalina y chocar contra ella, posiblemente destrozandola y continuando su camino.
Doton: Sento no kōshō 60 PV + Poder de Ranko 20 = 80 Raiton: Rairyū no Tsume 40 pv + Ventaja elemental (50%) 20 PV +Poder de Reiji 40 = 100
100 - 80 = 20 PV restantes
La garra del dragón atravesaría la jabalina y seguiría su camino en dirección a Ranko. Igual que había desgarrado la roca, la cuchilla continuaría su camino en busca del cuerpo se mi rival.
- PV:
157/190
–
-0
–
- CK:
63/190
–
+0
–
-24
–
- Daño Recibido: -
- Posible Daño provocado:
20 PV Raiton: Rairyū no Tsume
- Acciones ocultas: -
- Aclaraciones: -
- Bonus de Tsubame : +2PV a daños por corte
-2
– (El bonus se pierde tras el uso de la técnica)
- Bonus de Aichō: +10 PV a daños por corte.
6/06/2020, 18:07 (Última modificación: 6/06/2020, 18:10 por Sagiso Ranko. Editado 1 vez en total.)
Tiempo después, Ranko reflexionaría sobre aquella bandana. ¿Qué simbolizaba eso? El que un Uzujin reparase dos emblemas de Kusagakure. ¿Acaso era que el Remolino arremetería incansable contra la Hierba y la dominaría a su manera? ¿O era que aquella placa con el zigzag estaba cumpliendo su función: ser algo que se lleva a batalla y se porta cual cicatriz de guerra? ¿Era tal vez muestra de que, pesar de los roces, la Aldeas podían llevarse bien?
Pero en ese momento, Ranko sólo sonrió ampliamente al escuchar la intención de Reiji. Le contestaría después, ya que la intensidad del momento le impediría hablar mucho.
¡Ah! ¡El jutsu insignia de la Espiral era una esfera espiral! ¡Muy temático! Aquellas palabras del Uzujin no hacían más que confirmar la idea que Ranko ya tenía: había guerreros honorables entre las filas rojas. La sonrisa de la Kusajin se ensanchó aún más.
Y entonces Reiji contraatacó. Lanzó una especie de cuchilla voladora hecha de relámpago.
"¡Oh, por el espíritu del bosque! ¿Raiton, en serio? ¡No bromeaba cuando le dije a Yota que me sentía pararrayos!"
Las técnicas chocaron y la cuchilla se abrió paso entre el arma rocosa y siguió su camino, aunque debilitada, hacia la chica. Ranko alzó la diestra, cubriéndose con el antebrazo y apretando los dientes. El relámpago era filoso, pero pudo resistir, aunque el impacto la ralentizó un poco. Ahora era su guardabrazos el que estaba dañado, presentando un corte chamuscado. Debajo de él, había sentido la placa de Kusagakure apretando contra su cuerpo. El corte también había dejado una línea desde el dorso de su mano hasta su codo, y, al parecer, le había achicharrado algunos mechones de cabello.
Pero la chica seguiría, fiera, y acortaría la distancia entre ella y él mientras llevaba su siniestra al portaobjetos y sacaba su kunai. Lo blandiría en dirección hacia su pecho, con mano firme, mientras su herida diestra buscaba su wakizashi a la espalda. Pero no la desenvainaría aún.
"Aún no. Sólo un momento más."
La chicha no dejaría de presionar, avanzando constantemente a pesar de tenerlo dentro de rango de ataque.
¤ Hitai-ate [Protección 7PV)] (bajo el guardabrazo derecho)
¤ Portaobjetos básico[Capacidad 7/10](ajustado sobre su cinto, a su izquierda), dentro el cual:
Shuriken x 3 [Corte superficial 8PV, Corte/impacto 12PV]
Kemuridama [Consumible, 6m de humo por 2 turnos]
Hilo shinobi [Consumible, 10/10m]
C-Ranku no Kibaku Fuda [Consumible, 30PV, 1.5m radio]
¤ Wakizashi (a la espalda, a la altura de la cadera, empuñadura hacia la derecha) [Mango/vaina 12PV, Corte superficial 18PV, Corte 22PV, Penetración 30PV]
Que mi oponente se movía mas despacio que ante era evidente para alguien que tenia cierta capacidad para calcular las distancias a simple vista e incluso contar por debajo de los segundos.
Ella no se paró ante la garra del dragon de trueno, no. La recibió y siguió hacia mi como la fiera guerrera Kusajin que era. Tenia que admitirlo, eran fuertes y resistentes físicamente.
Eso si, esperaba que no pensase que yo no iba a devolverle los golpes. Claro que lo haría. De hecho, me preparé para el contraataque. Quizás, era el momento de sacar a relucir mi nueva técnica.
Por eso, y seguramente para sorpresa de mi rival, que seguramente esperaría que intentara esquivar el golpe con su Kunai, no lo hice. Como Datsue había dicho, aprovecha lo que tienes ahora. Dolería, si que dolería. Pero la herida desaparecería mas tarde.
Sin embargo, lo recibí por una razón muy simple. Iba a hacerlo una tercera vez. Aprovecharía la distancia cuerpo a cuerpo y la sorpresa para agarrar nuevamente a Ranko de la ropa, aunque mi espada ya se dirigíria veloz y violentamente, gracias a otro de los usos del raiton, hacia su abdomen, lugar donde ya tenia una herida provocada por el Rasengan.
Quizás me había pasado de nuevo. Pero se lo había prometido a Datsue, a Eri, a Hana. Me lo había prometido a mi mismo, por Yuuna, por Katsudon. Que iría a ese combate con todo. Y si fallaba, y eso me hacia perder el combate, todos sabrían que por lo menos, había dado todo de mí.
- PV:
145/190
–
-12
–
- CK:
9/190
–
+0
–
-54
–
- Daño Recibido: 12 PV Corte
- Posible Daño provocado:
90 PVKōsen
- Acciones ocultas: -
- Aclaraciones: -
- Bonus de Tsubame : +0PV a daños por corte
-2
– (El bonus se pierde tras el uso de la técnica)
- Bonus de Aichō: +10 PV a daños por corte.
7/06/2020, 02:57 (Última modificación: 7/06/2020, 02:59 por Sagiso Ranko. Editado 1 vez en total.)
"Me di cuenta de algo, Reiji-san."
Komachi, la madre de Ranko, le había aconsejado varias veces retroceder y analizar a su enemigo. ¿Y qué sabía de Sasaki Reiji? Antes del combate, solo sabía que era un espadachín. Durante los intercambios, descubrió que podía usar elemento Relámpago, además de una chula técnica cuerpo a cuerpo, y Ranko contaba con ello.
"Me di cuenta que te gusta agarrar al contrincante para asegurar tu golpe."
El ataque con el kunai no era lo importante, y no le habría importado fallarlo, aunque claro, no esperaba conectarlo. Lo importante era entrar en el rango del chico y continuar avanzando a paso firme. Y Reiji reaccionó a como la Kusajin esperaba: asiéndole de la blusa. La mano derecha de la kunoichi, que había ido a buscar la wakizashi pero no se había hecho con ella, se movió para apresar fuertemente la muñeca del Uzujin. A como había sentido el tirón en su pantalón hacía varios momentos, estimaba que, a grandes rasgos, ella tendría mejor agarre que él.
"Si tú aciertas, yo también lo haré" pensó mientras su chakra fluía a su pierna.
Hubo entonces dos destellos, uno justo después del otro. El primero surgió del filo del Uzujin, una estocada que se sintió como una descarga de cuchillas atravesando el ya adolorido abdomen de Ranko, y que le dolió hasta el alma. El segundo surgió de la pierna de la Kusajin, quien lanzó una serie de diez patadas en poco más de un segundo, todas dirigidas a la cara de su oponente.
Ranko no soltaría la mano de Reiji sino hasta después de que ambas técnicas impactaran. Su vientre ardía en demasía, y sangraba mucho. Retrocedió, apretando aún más los dientes.
"No caigas, no caigas, no caigas."
Se sentía peor de lo que se veía, como si sus ánimos disminuyeran rápidamente junto a su fuerza. Percibía que no podría aguantar por mucho, y en cualquier momento caería rendida. Su visión se nubló por un momento. No estaba del todo segura de qué haría a partir de allí. Si Reiji resistía su jutsu, Ranko no tendría ya oportunidad.
"¡No! ¡No caigas!"
—U-un guerrero —dijo con voz cansada mientras alzaba con sumo trabajo sus brazos, en guardia —. Un gran guerrero en verdad.
PV
20/230
–
-90
–
-10
– CK
12/150
–
-60
–
Contusión:
–
3/5
–
Hemorragia
–
Daño recibido:90PV [Kōsen] Posible daño infligido:100 PV, [Hakuto no Shunjukkyaku]
¤ Hitai-ate [Protección 7PV)] (bajo el guardabrazo derecho)
¤ Portaobjetos básico[Capacidad 7/10](ajustado sobre su cinto, a su izquierda), dentro el cual:
Shuriken x 3 [Corte superficial 8PV, Corte/impacto 12PV]
Kemuridama [Consumible, 6m de humo por 2 turnos]
Hilo shinobi [Consumible, 10/10m]
C-Ranku no Kibaku Fuda [Consumible, 30PV, 1.5m radio]
¤ Wakizashi (a la espalda, a la altura de la cadera, empuñadura hacia la derecha) [Mango/vaina 12PV, Corte superficial 18PV, Corte 22PV, Penetración 30PV]