Este foro utiliza cookies
Este foro utiliza cookies para guardar tu información de inicio de sesión si estás registrado, y tu última visita si no lo estás. Las cookies son pequeños documentos de texto guardados en tu ordenador; las cookies establecidas por este foro sólo pueden ser utilizadas en este mismo sitio y no poseen riesgos de seguridad. Las cookies de este foro también llevan un registro de los temas que has leído y cuándo fue la última vez que los leíste. Los administradores NO tienen acceso a esta información, sólo TU NAVEGADOR. Por favor confirma si aceptas el establecimiento de estas cookies.

Se guardará una cookie en tu navegador sea cual sea tu elección para no tener que hacerte esta pregunta otra vez. Podrás cambiar tus ajustes sobre cookies en cualquier momento usando el link en el pie de página.
Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
#16
Al final, Daruu sí que se había pedido un té, uno con limón. Ahora le daba un rápido trago a la bebida mientras Reiji le interpelaba. Y volvía a recordarle su combate. Indirectamente, lo que sucedió más tarde. Una sombra de dolor cruzó por el brillo de sus ojos blancos.

Gané... —dijo. Quizá para ahorrarse detalles más tarde convenía pasar por encima del tema rápidamente—. Me tocó contra Ayame. El combate muy bien, pero luego discutimos con nuestros padres y se fue el día a la mierda. Todavía no he hablado con ella. Ambos nos fuimos bastante mal. Por eso la cara de pasa que tenía esta mañana —confesó—. Respecto al combate en sí, pues como te digo muy bien, aunque me da lástima haberla eliminado de los puestos superiores en la primera ronda. Me hubiera gustado que ambos aguantásemos hasta el final.

»¿Has mencionado algo sobre una forja? ¿Eres herrero? —preguntó con curiosidad.
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder
#17
Podía entender el malestar de Daruu, las discusiones con la familia y los seres queridos siempre eran amargas, pero al final, acababas por solucionarlo. Seguro que había sido una tontería y se solucionaba antes o después. Pero mejor no meterse en los asuntos familiares de otras personas.

¿Has mencionado algo sobre una forja? ¿Eres herrero?

Creía recordar habérselo dicho cuando peleamos en el puente. Quizás se había olvidado o por lo menos, yo esperaba que se tratara de eso. Cualquier otra posibilidad era... Demasiado oscura.

Mi padre es el mejor herrero de Uzushiogakure, y yo soy su aprendiz. Pero yo no voy a ser el mejor de Uzushiogakure, ni de Oonindo. Yo voy a ser una leyenda.

En los libros de texto aparecería mi nombre, no por ser el héroe que los salvo a todos, si no por ser el tio qué forjó el arma que usaba el héroe para salvarlos a todos. Los mejores guerreros de la historia, lo serian, no solo por su habilidad, si no por portar una de las armas forjadas por mí.

Y mi leyenda empezó en el momento en que el mismísimo Uzukage acepto portar un arma hecha en mi forja.
[Imagen: ksQJqx9.png]
Responder
#18
Al parecer Reiji había aprendido el oficio de su padre. Si el muchacho se lo había contado anteriormente, Daruu simplemente no lo recordaba. Al fin y al cabo, sólo se habían encontrado una vez. Aunque... ahora que lo pensaba...

¡El Uzukage! Eso es impresionante. ¡Guau! Oye, oye, ¿es posible que me dijeras que habías forjado tus espadas tú mismo? ¿O una de ellas, al menos? ¿En nuestro combate? —Daruu torció la cabeza, interrogante.
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder
#19
¡El Uzukage! Eso es impresionante. ¡Guau! Oye, oye, ¿es posible que me dijeras que habías forjado tus espadas tú mismo? ¿O una de ellas, al menos? ¿En nuestro combate?

Pues seguro que sí. Conociéndome, habría aprovechado para promocionar la calidad del acero de los Sasaki. Casi tan seguro como que había mencionado lo del arma de Hanabi.

Pues seguro que sí. Cuando era mas joven me hice una wakizashi, no podia levantar una espada mas grande, pero ya se ma he quedado pequeña, y hace muy poco forje una uchigatana nueva.

No me había deshecho de Ichiko, la había colgado en una de las paredes del barco como si fuese un tesoro. Por que lo era. Era la primera arma que había forjado.

Esta.

Dije enseñando a Aichō, sin desenvainar, por encima de la mesa. En realidad era mucho mas que una espada, significaba muchísimo más. Pero era mejor que nadie lo supiera.

La otra espada me la hizo mi padre cuando me gradué en la academia.

Y no podía no utilizara. Ni cambiarla por otra. Tsubame era insustituible.
[Imagen: ksQJqx9.png]
Responder
#20
Al parecer Reiji tenía unas habilidades sorprendentes. Daruu respetaba muchísimo a quienes eran capaces de fabricar cosas como aquellas. Él mismo acudía a buenos artesanos de vez en cuando. Uno de ellos, uno viejo, huraño y esquivo, había fabricado las espadas que tenía atadas ahora mismo a las muñecas. Como signo de cortesía, Daruu se remangó y desenganchó el artefacto de la muñequera derecha. Se lo cedió a Reiji para que lo viera bien. Con el seguro puesto, claro.

Se trataba, aparentemente, de una vaina verde sin guarda. Pero Reiji ya la había visto antes: aquella espada era capaz de extenderse hasta casi el tamaño de una katana cualquiera. Y había unas marcas donde debía estar la guarda que sin duda se abrían también.

Se llama Mukei. Esta en concreto, Migi no Mukei. La otra, Hidari no Mukei/i]. Juntas, se llaman [i]Futatsu Mukei —explicó—. Se las compré a un tipo llamado Gaako Kenzaemon, un viejo receloso que sólo "vende a los capaces" y que literalmente no tiene la tienda abierta. No, tienes que buscarlo. Forma parte de su juego.

»Y lo de "los capaces" es tan sencillo como que tienes que vencerle a un duelo. No es fácil, el tipo ha visto días mejores pero sigue siendo fuerte.
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder
#21
Si, tus espadas tienen un mecanismo muy interesante. Ese tal Kenzaemon seguro que es un gran herrero.

Y seguro que tenia mas experiencia de la que tenia yo, pero para mí, su método me parecía incorrecto. No se trataba de hacer armas solo para los capaces, se trataba de hacer armas para que cualquiera fuera capaz.

Tiene un método bastante curioso para seleccionar a sus clientes, y aunque me gustaría viajar y aprender de todos los herreros de Oonindo algún día, —Si quería ser una leyenda, no podía aprender solo de mi padre, tendría que aprender los estilos y métodos de otros países. —[Color]Soy incapaz de aprobarlo.[/color]

»No digo que sea malo, mejor o peor que otros, pero yo prefiero pesar que, forjando el arma adecuada, cualquiera puede convertirse en alguien "capaz". Incluso el peor gennin de la academia, incapaz de hacer bien ni un sola serie de sellos, puede convertirse en un ninja decente con tan solo darle una espada.

Aunque el camino hasta ese último pensamiento había sido bastate difícil e incluso había necesitado ayuda de otros para poder pensar así. Un año atrás, habría sido incapaz de decir algo así.
[Imagen: ksQJqx9.png]
Responder
#22
Daruu torció el gesto, con un claro semblante de desacuerdo.

Pero Reiji, la espada no se maneja sola —dijo—. Quiero decir, si le das una espada a alguien que no sabe utilizarla, y que no está dispuesto a aprender, será imposible que se convierta ni en ninja ni en nada. Por muy "adecuada" que sea dicho arma. ¿No crees?
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder
#23
Si no quiere aprender, es que la espada no es adecuada para él. Quizás puedes darle una lanza, o un cuchillo, tal vez una maza. El arma adecuada le sacará la voluntad de aprender, de seguir adelante.

Cuando no sabes como seguir, cuando has perdido de vista todos los caminos, si hay alguien que te enseña un camino por el que avanzar, es muy raro que lo rechazes. Sobretodo, cuando ese camino que te muestran, es uno por el que puedes andas con confianza.

Al final, es cuestión de voluntad. Y esa voluntad se le puede sacar a cualquiera.
[Imagen: ksQJqx9.png]
Responder
#24
Daruu no estaba en absoluto de acuerdo con Reiji, pero tampoco iba a discutir. Primero, porque tenía pinta de que Reiji era de esas personas que seguiría tratando de imponer su voluntad. Como él mismo decía, al fin y al cabo. Y segundo, porque Daruu tenía la tripa llena y en ese momento le daba pereza cualquier tipo de discusión.

¿Cómo te sacaron a ti esa voluntad, Reiji? —rio Daruu—. ¿Por qué no dejas de ser ninja y te centras en el camino del herrero? ¿Qué es lo que hace que sigas en esto?
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder
#25
¿Sinceramente? Muchas veces me he preguntado ¿Que hace un tío, incapaz de hacer bien la serie de sellos mas simple, siendo un ninja?

Ni siquiera ahora era capaz de responder a esa pregunta. Pero ahí estaba. Subiendo escalones en un torneo de ninjas. Solo yo y mis espadas. Quizás no había tenido el mejor comienzo del mundo, pero aún así...

Siempre había pensado que seria el hazmerreír, no solo entre los mios, si no también para el resto de aldeas. Que dejaría en ridículo a los míos, y que los otros Kages se reirían del Uzukage por permitir que alguien como yo llevase una bandana.

Pero. Ya no. No había cabida para esos pensamientos en mi cabeza. No se quería salvar a toda una villa, aunque no fuera la mía.

Incluso llegue a presentarme en el despacho de Hanabi para dimitir, y estuve como un año siendo un simple civil. Pero entonces Datsue vino para convencerme de que estaba equivocado y que tenia que recuperar mi bandana.

Y entonces todo empezó a cambiar. Quizás para bien, quizás para mal. Pero si había gente que confiaba en mí como shinobi...

Él, Hanabi, Katsudon, Yuuna... Todos ellos confían en mi como ninja. No puedo coger esa confianza y simplemente tirarla por la borda. Eso es lo que hace que siga adelante.
[Imagen: ksQJqx9.png]
Responder
#26
Daruu sonrió y asintió, motivado por el discurso de autoconvencimiento de Reiji.

Te diré algo —dijo, y se acercó apoyando los codos en la mesa—. Yo me apunté a esto sólo porque mi madre lo fue, porque crecí en una villa llena de shinobi, porque es rentable y porque me parece honrado ganarse la vida defendiendo a los tuyos. Pero no tenía mayores aspiraciones, y a veces incluso pensé que esto me llenaba menos que... yo qué se, montarme una pizzería —rio—. Pero a lo largo de mi tiempo como ninja he descubierto lo que de verdad me mueve, Reiji. Un shinobi puede cambiar el curso de la historia.

»Un shinobi puede provocar una guerra, o cortarla de raíz. Aspiro a amasar el poder necesario para ser ese shinobi. Y cada uno de nosotros tiene su camino.

»Si el tuyo es el del acero, que así sea, y que piensen lo que quieran. No necesitas la aprobación de nadie. Sólo tu filo cortando el hilo equivocado de la historia y bloqueando la espada que cercenaría el correcto.
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder
#27
Aquello era una forma bastante bonita de decirlo, el problema era... ¿Era lo suficientemente rápido para bloquear el acero que cortaba el hilo correcto? ¿Era capaz de llegar a tiempo? Por que, cuanto mas tiempo pasaba, peor parecía la cosa.

Bueno, lo que dices tiene sentido y es cierto, pero también pienso que cualquiera, aunque pueda ser por accidente o sin darse cuenta, puede provocar una guerra. Aunque otra cosa bien distinta es tener el control sobre eso.

Imaginaba que se refería exactamente a eso, a tener el poder se controlar la situación. Pero ¿En realidad era bueno que alguien tuviera el poder para eso? Por que alguien con el poder para provocar una guerra era alguien que confiaba en ese mismo poder para ganarla.

Kurama, por ejemplo. Tenia un poder devastador, aunque seguramente yo no fuera consciente de su alcance, y estaba dispuesto a usarlo para dominar Oonindo. Daruu no tenia pinta de querer usar el poder de esa manera, pero uno nunca se sabe.

Si estas decidido a conseguirlo, estoy seguro de que lo harás. Pareces lo suficiente fuerte para hacerlo.

Yo en cambio... Si quería proteger ese hilo y cortar el otro... Todavía tenia que mejorar bastante. Empezando por ascender, quizás. No podía quedarme toda la vida como un gennin.
[Imagen: ksQJqx9.png]
Responder
#28
Daruu se encogió de hombros.

Tenemos que hacernos fuertes para pararle los pies al tipo que quiera provocar una guerra —dijo—. Ahora mismo, ese tipo se llama Kurama. Y sus dichosos Generales.

El Hyūga cerró el puño con fuerza, observándolo con determinación.

»Ayame, Datsue, Hanabi y yo derrotamos a uno, ¿sabes? Debes de estar preparado: son más fuertes de lo que podrías imaginar. Son peligrosos. Y además, creo que ambos tenemos cierto otro enemigo en común. Hablo de Uchiha Akame y Umikiba Kaido. Dragón Rojo.

»Y por otro lado estos kusareños. La verdad, hay muchos motivos ahora para entrenar duro.
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder
#29
Oh si. Daruu tenía razón. Ese tipo se llamaba Kurama. Y probablemente era el culpable de todo lo que estaba sucediendo en el pais de Yuuna. Pero mi primera misión era salvar a los samuráis, antes que derrotar a Kurama.

Ademas, lo mío con los ninjas del copo de nieve, su ejercito, era personal, sobretodo si las sospechas que tenia sobre por que atacaron el barco eran ciertas. Ademas, de que, vista la facilidad con la que se colaron en el pueblo de los samuráis, era casi seguro que todo aquel lío era cosa de ellos.

Oh, si, conozco vuestras hazañas con el general de Kurama, lo escuché de Hanabi y de Datsue, y mas tarde también de Ayame y Kokuō.

»Pero no pienses que sois los únicos que peleasteis contra los ninjas de Kurama, yo me enfrente a los shinobis del copo de nieve, su ejército. Podrían parecer gente aleatoria que ha ido cogiendo por ahí, pero eran shinobis bien experimentados, con la habilidad incluso de hacer sellos con una sola mano. Probablemente sean exiliados de otras aldeas...

Lo cual llevaba al otro tema, si. Akame. Esa rata traidora. Primero se le creía muerto, por un ataque que hicieron unos desconocidos que se colaron el Uzushiogakure. Luego resultaba que estaba vivito, y ademas, que el mismo se había colado en uzushio a matar a otros shinobis.

No me extrañaría que los de dragón rojo formasen parte de los ninjas del copo de nieve. Al fin y al cabo ese traidor de Akame era un jounin experimentado, estoy seguro de que Kurama le entregaría la bandana del copo de nieve a gusto. A Kaido no lo conozco.

Por suerte. Era mejor no saber nada de un traidor o estar relacionado con ellos. Aunque fuesen de otras aldeas.

Lo de Kusagakure... No me atrevo a Juzgar a la Morikage. Odia a todos los bijuus por que uno de ellos mato a uno de sus seres queridos, pero la mayoría de nosotros actuamos así. Los samuráis odian a los Ninjas, a todos, por que unos mataron a su Lider. —Concretamente, los de Kurama. —Incluso algunos de nosotros hemos caído en lo mismo, odiando a todos los kusajin solo por que su líder quiera matar a nuestros amigos. Pero al final, los Kusajin no tienen mas remedio que seguir ordenes o morir...
[Imagen: ksQJqx9.png]
Responder
#30
Daruu se sorprendió. ¿Ninjas del copo de nieve? ¿Trabajaban para Kurama? Podría haberle preguntado más a Reiji al respecto. Podría haberle preguntado mucho, mucho más. Y sin embargo, el joven pasó a hablar sobre Kusagakure y Daruu perdió dicha oportunidad... por el momento.

Bueno, mira —espetó Daruu, seco—. A mí me da igual si tienen culpa o no. Sólo sé que esa hija de puta amenazó de muerte a mi novia y a uno de mis mejores amigos, y si por mi fuera pueden irse todos al cuerno. —Y con esto, zanjó el tema de Kusagakure.

»Oye, oye, oye. A propósito de los ninjas del "copo de nieve". ¿Eso cuándo pasó? ¿Por qué es su ejército? ¿Tiene esto algo que ver con tu reunión con Ayame? ¡No me ha contado nada! Escucha, ¿has hablado con Kokuō? No me jodas, ahora no me dejes así.
[Imagen: K02XwLh.png]

No hay marcas de sangre registradas.
Responder



This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.